El cuidado del ambiente debe iniciar con el cuidado personal y familiar, de la casa, de las calles, de no tirar basura en cualquier lugar, comprendiendo que es preferible guardarla hasta llegar al lugar adecuado y asignado para contenerla porque más tarde será recogida y clasificada para ser llevada al espacio de concentración (el basurero municipal, por ejemplo).
Esto forma parte de una cultura, de hábitos comportamentales que se van formando en el individuo como un proceso natural, producto de lo que aprendemos en casa desde el nacimiento. En este momento, por la pandemia, lavarse las manos continuamente es un hábito protector, preventivo. Y pensemos que limpiar la esfera sincronizada en el cosmos es una labor colectiva muy importante para conservar la aldea planetaria que es donde se preserva la vida y encontramos todo lo necesario para sobrevivir.
La naturaleza y todo lo existente en nuestro alrededor interactúan con las actividades humanas a través de factores biológicos como la flora, la fauna y diversos microorganismos. Hay componentes físico-químicos, como el suelo, el aire, el agua, los contaminantes que producen la actividad humana, el uso y manejo del agua, la urbanización, la producción agrícola, de animales, industrial y energética, que si no tiene límites en su manejo, puede afectar la salud y el bienestar físico, mental y social de las personas (Castro, R. Pérez, 2009).
En este sentido, los seres humanos experimentan el medio ambiente en que viven como un conjunto de condiciones físicas, químicas, biológicas, sociales, culturales y económicas que difieren según el lugar geográfico, la infraestructura, el grado de desarrollo comunitario, la estación del año, el momento del día y la actividad que se realiza (Diplomado “Vida Saludable”, SEP, 2021).
El agua contaminada afecta la salud ya que es un medio de transmisión que puede causar enfermedades como diarrea, cólera, disentería, hepatitis, tifoidea y hasta poliomielitis, por los desechos químicos o microorganismos que puede contener. En Xantolo pasado, sufrieron por el agua contaminada en la región de la Huasteca, entre Huejutla y Platón Sánchez, situación que afortunadamente ya se resolvió. También el aire puede estar contaminado por humo, polvo o partículas suspendidas que contengan microorganismos y virus (OMS, 2020), o el suelo contaminado por sustancias químicas generando con ello enfermedades y padecimientos.
Muchas de las acciones a realizar para evitar o disminuir la contaminación ambiental involucran a las autoridades gubernamentales del país, quienes además participan en actividades mundiales, como la COP26 que se celebró en Glasgow, para revisar las políticas internacionales en materia de protección y preservación del medio ambiente.
Según el INEGI (2009), en México se recolectaban más de 107 mil toneladas de basura al día, lo que equivalía a más de 800 gramos por persona diariamente. Si esta basura no es tratada adecuadamente, puede generar daños en la salud y fomentar fauna nociva que propague enfermedades con muchos efectos a corto y mediano plazo. Es importante crear hábitos que ayuden a preservar el cuidado de la persona y del medio ambiente como una medida para cuidar la vida.
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