No puede haber “borrón y cuenta nueva” ante cadáveres, desapariciones, sangre, trastupijes y hechos de lesa patria. No es cosa menor lo acontecido a lo largo de esa sombría aventura neoliberal de 5 sexenios (1988-2018), donde al amparo del poder hubo “la concentración desmesurada de riqueza, quebrantos monumentales al erario, privatización de bienes públicos, corrupción generalizada, procesos electorales viciados y prácticas gubernamentales que desembocaron en un crecimiento descontrolado de la violencia, la inseguridad pública, la violación masiva de los derechos humanos y la impunidad como norma del desgajamiento del estado de derecho en extensas zonas de la nación”, sin que mediara en ningún caso la política con ética y se sufriera esa etapa trágica en todos los confines de nuestro país.“¿Cómo explicar las impresionantes fortunas marca Forbes sin las privatizaciones y los respaldos especiales de esos exmandatarios?; ¿Cómo justificar el aumento escandaloso de pobres y miserables en México?...” La salud de la República exige una respuesta positiva para proceder en consecuencia. Peña Nieto, Calderón Hinojosa, Fox Quesada, Zedillo Ponce de León y Salinas de Gortari están en el banquillo de los señalados y – se supone – preparan sus estrategias defensivas.
En el marco de esos asuntos de interés general, durante el pasado mes de septiembre un grupo de docentes jubilados (normalistas y universitarios) que cada semana efectuamos una “sesión participativa virtual” ante las angustias pandémicas, determinamos elaborar una quiniela o encuesta sobre el debatido asunto de enjuiciamiento a los expresidentes para dirimir, en términos cordiales y civilizados, nuestras divergencias y particulares apreciaciones por cuanto al proceso inculpatorio a esos “retirados” monarcas sexenales. A mí me tocó presentar el borrador del instrumento de opinión, mismo que fue mejorado con la intervención de dos contertulios. Tal “encuesta doméstica” se circunscribió a 4 preguntas o cuestionamientos. Las dos primeras (con “respuesta cerrada”) fueron de doble alternativa, para responderse con Si ó No; la tercera pregunta (con “respuesta cerrada”) fue de ordenamiento, del 1 al 5 y la última cuestión con “respuesta abierta”, para superarse mediante un comentario (como tema breve).
Interesante resultó dicho ejercicio de participación voluntaria, toda vez que en la labor participamos 20 personas, entre colegas jubilosos, amigos, vecinos y familiares, arribando a los siguientes resultados. A la pregunta uno: El proceso al que está sometido Lozoya Austin, ¿dará lugar a enjuiciar formalmente a uno o más expresidentes de México?, el 80% de los encuestados contestó afirmativamente y el 20% procedió en sentido opuesto. Ante la interrogante dos, En el juicio que se sigue a García Luna en Estados Unidos, ¿se llamará a comparecer a Felipe Calderón Hinojosa?, el 80% tachó Sí y el 20% indicó No; por cuanto a la cuestión tercera, De los expresidentes que se apuntan, coloque el número 1 a quien usted considere que tiene el mayor riesgo de ser enjuiciado y/o encarcelado, el número 2 a quien le siga en riesgo, y así sucesivamente los números 3, 4 y 5; el “efecto encuestador” arrojó: El
expresidente más señalado fue Calderón Hinojosa, seguido por Peña Nieto (a juicio de los participantes son los que “corren mayor riesgo”), a Salinas de Gortari lo ubicaron como tercero en “estado de emergencia”, a Fox Quesada lo “encasillaron” en el cuarto estante y Zedillo Ponce de León resultó ser “el menos golpeado”. Por razones de espacio, transfiero para un próximo artículo las opiniones y puntos de vista expuestos sobre la cuestión cuatro de dicha encuesta (de respuesta abierta).
Ni duda cabe, “… sorpresas te da la vida Mariana, sorpresas…”; los encuestados veracruzanos aportaron su sentir espontáneo antes de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación aprobara por mayoría la realización de la consulta popular ciudadana (en 2021) e ignorando así mismo preceptos específicos de carácter legal relativos al enjuiciamiento de funcionarios públicos. Singularmente coincidieron (o coincidimos) con abogados de prosapia y con especialistas en la materia, en el sentido que los exmandatarios “con más probabilidad de ser convocados, investigados y enjuiciados serían Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, porque los delitos no habrían prescrito; no así en los casos de Vicente Fox, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo”. Ante tales casos, “de no poder impulsar una acción jurídica, se podría impulsar una investigación acuciosa (comisión de la verdad) para conocer los alcances de la corrupción en el país y que se sepa hasta dónde llegaron todos esos exmandatarios…” En el contexto, se aseveró: “no todo es jurídico, lo más importante es la participación y el juicio ciudadano”. Así que esto no se acaba hasta que se acaba, hasta que “caiga el último out”, acorde con los términos beisbolísticos en este mes de octubre de la Serie Mundial.
Atentamente
Profr. Jorge E. Lara de la Fraga. |
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