Aun cuando varios actores políticos, que no pertenecen al partido en el poder, ya han iniciado su desenfrenada carrera en busca de la candidatura al gobierno del estado, lo cierto es que no levanta ninguno.
Hacen ruido, presiden reuniones, reparten sonrisas, hasta el consancio se dejan tomar gráficas y saludan, hipócritamente, a todo mundo, pero no logran convencer al electorado veracruzano.
Ninguno despierte el interés del votante y si, muy al contrario, son cuestionados.
En su caminar político varios de ellos han dejado una estela de corrupción bastante admirable, los cargos dentro de la administración pública que han desempeñado o aquellos que han sido de representacion popular sólo los han ocupado para enriquecerse, para saciar sus ansias de poder, para acomodar a su parentela en puestos claves y al electorado lo han ignorado, únicamente lo han utilizado con fines perversos.
Les ha valido madre la población, lo suyo es primero y la demás no tiene importancia.
Al electorado sólo lo toman en cuenta en sus discursos, allí en donde lo resaltan y lo reconocen porque en los hechos para nada.
Muchos de ellos han sido tan mezquinos que ha lo descarada han interpuesto sus intereses personales dejando en el olvido los de la colectividad.
Se volvieron cínicos, valemadristas y ocurrentes.
Por lo anterior, aun cuando el trabajo realizado por el hijo de Atanasio es pésimo, el partido en el poder lleva ventaja.
Las luchas intestinas que vive MORENA le habrán de hacer daño, pero no al grado de ser derrotado. El capital electoral que posee le permite levantarse con la victoria el próximo año. Previniendo la situación a las vacas sagradas de MORENA se les ha ocurrido reprimir a la clase trabajadora oficial obligandola a hacer labor de proselitismo a favor del partido. Lo anterior sin lugar a dudas que les habrá de resultar contraproducente, estas acciones han causado bastante enojo entre la burocracia. Pero hasta allí.
La realidad es que en Veracruz, MORENA transita rumbo al 2024 de manera holgada, con cierta confianza.
En la entidad la oposición está dormida, no tiene rumbo, no hay liderazgo. Los tres institutos políticos que se han pronunciado por ir en alíanza no garantizan un acuerdo, dos de ellos están más entretenidos en la lucha interna que en tratar de recobrar la confianza del electorado. Y, para rematar, uno de esos dirigentillos está a las órdenes del partido en el poder, simula ser oposición, hace berrinches, grita, alardea pero sólo basta un tronar de dedos de su manejador, por cierto, el número dos, para que se aplaque.
El "opositor" que más se la ha tomado en serio es "Huevos Tibios" un político perdedor pero, eso sí, con una gran hoja de servicios.
Lastima que se ha dejado envolver por puro truhán.
Lo reiteramos, en Veracruz no hay oposicion, por lo que si las hordas morenas logran ponerse de acuerdo la victoria no será cosa de mucho trámite.
Provecho.
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