Al dueño de La Chingada no lo calienta ni el sol.
Después de la magna marcha del pasado domingo, precisamente el día de su cumpleaños, no lo soporta nadie. Esa fue una pequeña muestra de que las cusas justas unen a todos los mexicanos,
Esos políticos que no se pidan ni ver, ahora marcharon juntos, se solidarizaron en bien de nuestro país, coyuntura que de ser muy bien aprovechada puedes sacar al nacido en Macuspana de Palacio Nacional.
Los cientos de miles mexicanos que marcharon no tan sólo en la capital del país, sino en distintos estados de la república mexicana, mostraron de manera muy diáfana el rechazo y hartazgo que les ha venido provocando el gobierno del señor López Obrador.
Y su encabronamiento no es para menos, ya que sabe que no las tiene todas de su parte y, como buen político, no desconoce que su futuro político es incierto, las cosas se le complican, y en serio, para el 2024. Y es que el inventor del hijo de Atanasio, observa el alto riesgo que se le avecina precisamente en el territorio que gobierna su “corcholata” favorita, sí la misma que mientras que en la Ciudad de México cientos de miles marchaban en defensa del INE, ella, muy fingidamente, repartía abrazos y sonrisas a los pobres veracruzanos que le hicieron el caldo gordo en el norte de la entidad veracruzana, una tal Claudia Sheinbaum Pardo.
De entrada, el dueño de “La Chingada” no tiene a quien culpar de la multitud de ciudadanos que salieron a las calles de la Ciudad de México el pasado domingo, lo cual no es otra cosa que una pequeña muestra de que en la capital del país no quieren, pero ni tantito, a su corcholata favorita. Ahora ni para culpar al zacatecano, al paisano de Rocío Nahle, a Ricardo Monreal Ávila, de tan portentosa aglomeración.
El revés para Sheinbaum Pardo es innegable. Ni a quien culpar. Ese nadie se lo quita. Pero imitando a su gurú, la “corcholata” favorita, fiel al estilo de su patrón, se adjudicó el derecho de agraviar a los manifestantes, los mismos que solo expresaron su sentir y su repudio hacia el tabasqueño.
Por lo mientras la damita en mención, por no decir “la corcholata”, dio una magistral muestra de su incompetencia como primera autoridad, dejo en claro que la Ciudad de México le ha venido grande, como también le ha quedado a deber a millones de capitalinos. Al parecer ya no le queda duda al tabasqueño que Claudia, no es su mejor carta para el 2024.
Fueron cerca de una veintena de entidades federativas donde miles de ciudadanos abarrotaron las calles, todos ellos salieron a marchar en defensa al INE.
Por lo mientras el riesgo que percibe el tabasqueño es algo que indudablemente le quita el sueño. Como también es incuestionable que la marcha del pasado domingo es una de las más grandes de los últimos años, o de décadas, mejor dicho.
Claro que sí.
BUEN FIN - A PURO ENDEUDARSE.
La doceava edición de tan marcado evento, para muchos no es otra cosa de echarse encima apuros económicos futuros.
Lo cierto es que la inmensa mayoría de consumidores no toman en cuenta las puntuales recomendaciones de los conocedores en materia financiera, cayendo el buró de crédito, ante la insolvencia económicas posterior.
Lamentablemente muchos de los futuros deudores no fijan una cantidad a gastar, dejan de lado el presupuesto disponible y se comprometen hasta decir basta.
La gran mayoría se deja llevar por la emoción del momento y adquiere artículos innecesarios, no sabe ni lo que quiere, muchos menos se toma la molestia de comparar precios para cerciorarse si realmente el artículo a adquirir tiene alguna rebaja o no.
Lo que se debe de tomar muy en cuenta es saber fructificar las ofertas y promociones, sin olvidar el tema de los meses sin intereses opción que sabiéndola utilizar permite evadir apuros económicos posteriores. Tener muy en cuenta la capacidad de pago es elemental, no lo olvide, lo más recomendable es no comprometer más allá del 30 por ciento de los ingresos mensuales.
Por lo mientras los hombres del dinero, la clase empresarial, ya se afila las uñas ya que se espera una derrama económica de miles de millones de pesos. |
|