Tanto como las aguas bajan, causa y efecto de los recientes trágicos acontecimientos se confunden, mejor dicho, se deforman en beneficio de los políticos grillos, que, olvidando a los damnificados, llevan agua a su molino, ojalá y la tomen de las malas aguas que han destruido Veracruz y Tabasco.
Los acontecimientos y declaraciones que se dan en medio de la desgracia que aun mortifica, ha sustituido la acción generosa de los mexicanos, adquieren relevancia los chismes y declaraciones amañadas de políticos e ignorantes de lo sucedido y sus causas, creando un mundo de confusión que provocará un estallido de violencia entre los indignados tabasqueños y veracruzanos que están siendo alimentados por odio. Si no conocen las autoridades actuales a sus paisanos, que repasen la historia, son de sangre muy caliente que generará incendios en cualquier momento.
Es incontrovertible que las Barras de varios ríos no han recibido mantenimiento, hay culpa de las autoridades de SCT que descuidaron esta importante función para desfogar gran parte del extraordinario caudal de pasados días, culpa fue de las autoridades locales que vieron sin chistar el retiro de las dragas o su inexistencia, para mantener un calado, también es culpa de las autoridades estatales que no chistaron teniendo pleno conocimiento de la función o disfunción de las barras, atendidas o no.
Ahora recuerdan el abandono del magnífico plan hidráulico de la Chontalpa, sin poner peros, los tabasqueños y sus gobiernos se hartaron con las limosnas de PEMEX, olvidaron que su futuro a largo plazo esta fundamentado en la agricultura, la ganadería e industrias complementarias de esta actividad. Engolosinados por lo petrolero olvidaron o abandonaron ese prodigio de ingeniería hidrológica que hubiera provisto, presas y recursos eléctricos para hacer el Granero de la Nación. Con Dos bocas se repite error.
Buscando, se culpó en esos días a CFE por haber abierto las compuertas de la presa PEÑITAS, pobres ignorantes, de no existir el control que los expertos de CONAGUA, CFE y otros organismos que atienden las grandes avenidas y control de nivel en las presas, muchos pueblos de Tabasco y Veracruz hubieran desaparecido por causa de las inundaciones.
El clima está cambiando, lo sucedido en Veracruz es una primera llamada de alerta a las autoridades federales para construir las obras que se han abandonado o soslayado, lo sucedido tiene remedio, en Tabasco y Chiapas se deberán realizar las obras hidráulicas pendientes. Lloremos por los muertos, pero pongamos atención a lo por hacer en bien de los vivos.
Hay mucho por hacer en Tabasco, Chiapas y Veracruz, antes de andar grillando entre partidos y políticos buscando a un pendejo, atendamos lo por hacer en bien de futuras generaciones, o actuamos hoy o … !AGUAS!
Octubre 31 de 2021 lmwolf1932@gmail.com Luís Martínez Wolf |
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