Nuestro muy honorable, popular, inteligente y perspicaz gobierno federal, puso aparir cuates a los ciudadanos mexicanos, bueno, a los ciudadanos ateos, pues los católicos atienden las disposiciones que deciden los altos prelados de a iglesia, en esta ocasión mas o menos decidieron, la encuesta propuesta por el gobierno federal, bajo la tutela, perdón, mandato de un genio político jarocho tabasqueño, dispuso, ¡TODOS! a presentarse en la casilla que les corresponde y tomar la sabia decisión de revisar lo hecho, por los mandatarios que le antecedieron y vía el sabio proceso consultivo, tomar la sabia decisión de poner ¡SI! En el papelito.
Yo pido mil ochocientas disculpas a nuestras autoridades, como soy medio tontejo, no entendí la pregunta o camino que debo seguir para tomar la opción más conveniente, si digo ¡SI! Parece que estoy en armonía con AMLO y recibiré premio, si digo ¡NO! Estoy frito no sé qué castigo se me aplique, pero por estar contra nuestro sabio mandatario, estoy haciendo fuera de la vainica y ensucio mi entorno, a nadie le gusta esa postura y merezco señalamiento por andar opinando en consultas que no entiendo.
Pido perdón a nuestras heroicas autoridades, les juro que no entiendo a cabalidad, con precisión, lo que se me plantea en la consulta, revisando lo que opinan los que si entienden lo que propone, expone o consultan nuestras autoridades, propalan que lo que se pone a discusión, no análisis, es si respetamos la ley o la mandamos al carajo, en pocas palabras, se nos plantea la opción de tomar la delicada opción de respeto a la ley o desacatamos su mandato al ponerla a debate o decisión si la respetamos o no.
Tengo un buen amigo yucateco que me dijo que la consulta era muy facil de entender, la revisó, tomó la sabia decisión de revisar lo que se le plantea, la cosa es sencilla, simplemente decidir que nos conviene más, al tomar la trascendente decisión de pedir en el restaurante unos panuchos, la respuesta es difícil, la opción es entre cochinita pibil o pavo negro estofado, mi amigo opto por la cochinita pibil, es clásica y fácil de preparar para las buenas cocineras Mayas.
Tenemos que jugar un poco con lo que no comprendemos, les juro, ya en serio, que no entiendo los términos de la consulta popular, me indigna que se me pregunte algo, o que me pongan a sufrir tratando de aclarar que desean que responda, a una pregunta que no está bien planteada o más sencillo, un tema innecesario, pues quienes la elaboraron, lo hicieron conscientes de que una mayoría de la población no atenderá la disposición de acudir a las urnas, en la que se decidirá si respetamos la ley o la mandamos a freír chongos, por intentar hacernos resolver una bronca que ni los altos jefes pueden resolver, como me caía mal uno de los expresidentes, tal vez decida poner no en la boleta consultora y sanseacabó. ¡AGUAS!
Agosto 2 de 2021 lmwolf1932 gmail.com |
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