Poco ruido se hace respecto al rompimiento y derrame de crudo en un sistema petrolero en el Golfo de Campeche o cercanías, el complejo KMZ agrupa varias plataformas, interconectada su producción por oleogasoducto, en el caso de esta confrlagracion, cercana 300 metros a la plataforma KU-SIERRA, se dan valores un poco confusos, pues algunos reportan la producción del complejo del orden de 100 Metros Cúbicos al día y Reuters, da informe relacionado con la plataforma cercana, la KU-Sierra, sea lo que sea, es un cabronal de petróleo el que se derrama sin control hasta el momento.
Vale la pena alarmarse, un derrame según Reuters en un tubo de 24 pulg. diametro y a presión que se ignora, pero el gasto dado por la informadora es de 111, 800 metros cúbicos al día, eso sencillamente es para estar alarmados, seguramente la información se refiere a la producción del complejo, puede ser, pero lo grave es que la válvula colapsada está a 70 metros de profundidad y lanza al medio ambiente marino, cantidades grandes de petróleo que al oxigenarse en la superficie y por alguna razón, incendiarse, tiene a los petroleros indefensos, con dos, hasta el momento, barcos contra incendio lanzando chorros de agua, más que para apagar el incendio para proteger a las plataformas cercanas habitadas por los operadores del sistema.
Tiempo es de que nuestras autoridades superiores se preparen para un derrame que puede llegar, con seguridad llegará, a nuestras costas, la bronca resultante es de pronóstico reservado, ante la gravedad del asunto, urgente, apremiante es, disponer de donde se puedan conseguir los sistemas contenedores del petróleo flotante, los vendavales que ya los tenemos encima, soplaran de sur a Norte y traerán a nuestras costas y hasta las de los gringos el petróleo derramado, la única alternativa es la contención en la sonda, evitar que avance y tener los sistemas de contención y recolección para evitar su propagación en diferentes áreas del Golfo de México.
Lo que estamos viendo en Campeche es una pequeña muestra de lo que el destino nos depara, entendamos, suena a novela, pero el destino nos alcanzó y es un destino trágico, dramático pues un tubo de 24 pulgadas sin control, continuara arrojando al océano cantidades muy grandes de un contaminante, el CRUDO, de muy difícil eliminación o recolección, pero es posible realizarlo, las autoridades deben poner toda su atención y recursos económicos, para recolectar el crudo flotante, con todos los medios y sistemas disponibles cerrar el ducto colapsado o bloquear su interconexión con el complejo, toda la capacidad de los técnicos al servicio de contener este dramático problema y poner atención a lo que sigue, el petróleo marítimo ha sido desde siempre la espada de Damocles que pende amenazante al medio ambiente marino y terrestre costero. ¡AGUAS!
Julio 4 de 2021 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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