La suprema realidad de nuestro tiempo es la vulnerabilidad de nuestro planeta.
J. F Kennedy
Pese a la crisis visible y cada vez mayor de nuestro medio ambiente, desgraciadamente muchos insisten en cuestionar la credibilidad de los datos que muestran nuestros errores y circunstancias.
Más allá de ideas o palabras, se manifiestan en las acciones requeridas para enfrentar la reciente ola de calor en nuestro país y sus repercusiones en las actividades cotidianas. La presidencia propone que se trabaje más temprano, como en el campo, resaltando que en ocasiones “se magnifica y que hay sensacionalismo” para este evento que solo fue algo especial.
O la ignorancia es mayúscula o les afecta en sus intereses económicos o políticos, pero el caso es que no les importa a los que toman decisiones la crisis ambiental que ya está sobre nosotros, concebir alternativas reales, construir ideas y acciones serias para enfrentar los riesgos generales a la población, con sus muertos, con anuncios de mayor crisis hacia lo inevitable del quiebre planetario.
En la entrega pasada se comentó sobre el estudio del grupo de científicos conocido como Comisión de la Tierra, que arroja datos difíciles de reducir en su trascendencia, que obligan a acciones institucionales y sociales de mayores proporciones a las de comentar que se resuelven levantándose temprano para no sufrir embates como los de las olas de calor.
El diagnóstico maneja como idea central el origen de los cambios: “Estos cambios son impulsados principalmente por sistemas sociales y económicos que se basan en la extracción y el consumo de recursos no sostenibles” además señala, “Las contribuciones al cambio del sistema terrestre y las consecuencias de sus impactos varían mucho entre grupos sociales y países. Dadas estas interdependencias entre el desarrollo humano inclusivo y un sistema terrestre estable y resiliente, se requiere una evaluación de límites seguros y justos que dé cuenta de la resiliencia del sistema terrestre y el bienestar humano en un marco integrado” , lo que supone condiciones para que el planeta ofrezca oportunidades de estabilidad para la vida en la tierra y evitar daños mayores a nosotros y a otras especies.
Entendiendo los daños que pueden existir y han sucedido, los que específicamente se identifican por países, grupos étnicos o géneros, el estudio se desarrolla a partir del criterio de “justicia para la humanidad”. Además acentúa que “Es un gran reto, ya que la Comisión de la Tierra concluye que varios de los límites seguros han sido cruzados a día de hoy” llamando por ende a acciones donde se incluyan los grupos más vulnerables, de allí la exigencia de construir parámetros que establezcan las condiciones de justicia.
Tal como lo plantea Joyeeta Gupta quien es una directiva del proyecto y quien comenta que “No podemos tener un planeta biofísicamente ‘seguro’ sin justicia. Esto incluye establecer objetivos justos para prevenir daños significativos y garantizar el acceso de las personas a los recursos” .
Esos límites de la justicia, refieren los que disminuyen los daños significativos para la humanidad. “La Comisión define el daño significativo como: impactos negativos graves, irreversibles o existenciales generalizados en países, comunidades y personas como consecuencia del cambio del sistema terrestre, tales como la pérdida de vidas, medios de subsistencia o ingresos, desplazamientos, pérdida de seguridad alimentaria, hídrica o nutricional, enfermedades crónicas, lesiones o malnutrición”.
Ejemplos de las mediciones y la relación con esos límites justos es la comprobación del clima, donde el límite justo y seguro sería un incremento no mayor a un grado y que ahora se encuentra en un límite seguro pero no justo de 1.2 y que dejaría de ser seguro si llegamos a 1.5.
Por delante tenemos tiempos muy difíciles en muchos órdenes de nuestras vidas. La inseguridad, la pobreza, la salud, las migraciones o el hambre pero todo eso podrá ser menor si el reloj de nuestra crisis ambiental no es detenido. El tiempo corre y el vacío cada vez está más cerca.
DE LA BITÁCORA DE LA TÍA QUETA
El 4 de julio en Coatepec Veracruz el Primer Foro por la Emergencia Ambiental y el Cambio Climático
|
|