Nada que valorar, nada que rectificar, nada que discutir o dialogar. Su opinión y visión de las cosas es lo único que vale, lo único cierto, la única verdad. Y todos los que piensan, sienten o ven algo distinto, es porque son sus enemigos o manipulados por ellos, o porque son conservadores, neoliberales o fifís que perdieron sus privilegios. Así con este gobierno y sus opiniones inamovibles.
En el caso de Salgado Macedonio, donde se solicita que no sea postulado como candidato de Morena, porque está denunciado por más de 4 mujeres por acoso sexual y violación, su respuesta es “Que decida el pueblo”, refiriéndose a los votos que obtenga como candidato a gobernador. Desde lo más alto del poder nacional, la postura final es no escuchar o atender los llamados de las mujeres, incluso de algunas de su propia organización política, descalificándolas públicamente.
Es el gran movimiento feminista mexicano quien ha puesto en entredicho su postura, dejándolo mal parado al mostrar su tozudez, insensibilidad y falta de empatía hacia ellas que le reclaman desde su pluralidad, con base en la dureza de los datos existentes y la crudeza de los daños y dolores que presentan, señalando consistentemente su exigencia por justicia.
Pero tristemente esa conducta se repite en otros asuntos de interés nacional.
La pandemia del COVID 19 es otro ejemplo. En su versión indiscutible, todo está perfectamente calculado, supongo que también los más de 200 mil mexicanos muertos. Ni por asomo plantearse una duda acerca de algunos errores que nos llevaran a competir por el índice de letalidad más alto del mundo, no, nada. Su inamovible opinión, desde hace un año, es que ya estamos al final del túnel, que ya pasó lo peor, aunque en el transcurso de los meses cambiáramos de glorificar nuestras “fortalezas” a asumirlas como nuestras debilidades, culpando siempre a los que se fueron hace dos años. Y por supuesto, el ejemplo paradigmático de ello ha sido el negarse a usar el cubrebocas.
Reitera todas las mañanas que en lo económico vamos muy bien. La inamovible opinión se hace palpable al dedicar a sus megaproyectos grandes porciones del presupuesto, aun cuando no tienen respaldo de su rentabilidad o ésta ha sido negativa. Mientras él se alegra por sus “avances”, la pobreza extrema del país
aumentó 7.7 % del 2019 al 2020, llevándonos al peor cuarto lugar en América Latina, solo superados por Honduras, Nicaragua y Guatemala (CEPAL 2020). ¿Formular una política pública emergente para reorientar recursos y paliar los estragos provocados por la pandemia en el sector empresarial de medianas y pequeñas industrias? No. No hace falta, los empresarios son fifís, privilegiados, que se rasquen con sus uñas, que sobrevivan tan solo los mas fuertes. En su opinión enfrentar la crisis están los programas sociales, y como él no se equivoca…
En unos meses habrá elecciones y el proceso electoral se encuentra bajo el asedio de la violencia política, lo cual no es un buen augurio. La Consultora Integralia reportó que, de septiembre 2020 a enero del 2021, hubo 88 víctimas de violencia política, de las que 65 fueron asesinadas.
Sin duda, para imaginar escenarios mejores los retos son enormes. Tal vez el mayor sea contrarrestar la idea de que los distintos no podemos hablar, dialogar, hacer acuerdos para avanzar. Estoy convencido de que es fundamental romper la idea de que hemos perdido el espacio para escucharnos en las diferencias, sobreponernos a esa visión asumida de cerrazón desde cualquier espacio. Acaso ese sea un primer paso de conciliación para escucharnos, en lugar de mantener las opiniones inamovibles.
DE LA BITÁCORA DE LA TÍA QUETA
8M 2021. Y con la pandemia también estuvieron, marchando y exigiendo. Voces y acciones que no se detendrán. |
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