EN LA mañanera del jueves 3, el Presidente Andrés Manuel López Obrador sorprendió a quienes seguían su tradicional conferencia en Palacio Nacional, hasta donde la Inteligencia Artificial mostró al jefe del Ejecutivo cantando “A Mi Manera”, una canción que hizo famosa Frank Sinatra, y que podría interpretarse de muchas formas, aunque debido a las postrimerías en que se encuentra el actual régimen, el titular del Ejecutivo recurrió a una canción nostálgica dando a entender que todo lo que inicia termina, como su sexenio, pero la letra de tan singular melodía contiene un párrafo que cita: “Viví la inmensidad, sin conocer jamás fronteras, jugué sin descansar, y a mi manera”, y la estrofa nos hizo pensar en algo que no tiene desperdició, y que ha sido producto de gobernar “a su manera”, indolente al sufrimiento de la gente y solo usándola para sus fines, haciéndoles creer que si le interesan, y que por ello les reparte limosnas que a los viejos les arrebatan los hijos o nietos, y a los jóvenes, en algunos casos, les sirven para emborracharse y consumir drogas, olvidando el mandatario aquella sentencia del filósofo chino, Confucio que alguna vez escribió: “dale pescado a un hombre y comerá un día, enséñale a pescar y comerá siempre”. Pero cuando se escuchó una y otra vez la frase: “A mi manera” en las voz de AMLO, gracias a la inteligencia artificial, inevitablemente se nos vinieron a la memoria los 162 mil 658 homicidios dolosos que se han perpetrado en su Gobierno (hasta el momento de la melodía), gracias a la instrucción de abrazar a delincuentes y no combatirlos, esto es, su desafortunada política de “abrazos no balazos” que ha impedido un combate frontal a la delincuencia, lo que ha provocado el surgimiento de pandillas que roban, asaltan con violencia, secuestran, extorsionan, asesinan, levantan y cobran piso, con la advertencia de que quienes no lo pagan son víctimas de asesinatos, quema de sus negocios o bienes o el plagio de algún familiar, todo eso, “a su manera”.
PORQUE LAS cifras no mienten, y el reporte ‘MX: La Guerra en Números’, de T-ResearchMX, refiere que el registro de homicidios dolosos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, del 1 de diciembre de 2018 al 6 de agosto de 2023, periodo que lleva en el poder el presidente Andrés Manuel López Obrador, la fiscalía Federal y las estatales tienen un registro de 162 mil 658 homicidios dolosos en el País (sin contar la cifra negra), con una severa tendencia al alza, y el mes con el mayor registro de homicidios fue octubre de 2020, con 3 mil 347; en cambio, el de menor acumulamiento de homicidios dolosos fue febrero de 2023 con 2 mil 204 eventos, frente a febrero de 2021, considerado por las propias autoridades como el mes con menos asesinatos, y todo eso ha sido, a su manera, aunque por fortuna, el final (del sexenio) se acerca ya, y lo esperará serenamente, ya ven que él ha sido así, y lo dice, sinceramente.
Y EN el mismo tonito de la canción, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) destaca que en lo que va del sexenio del Presidente López Obrador se registró una disminución de 0.4 por ciento en los asesinatos, aunque la percepción social dice todo lo contrario, ya que siete de cada 10 mujeres en México consideran que es inseguro vivir en su ciudad, según lo demuestra la más reciente Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), mientras que 62.3 por ciento de la población de 18 años y más consideró inseguro vivir en su ciudad, esto hasta el 19 de Julio de este año.
LO CIERTO es que el Presidente evita hablar sobre la inseguridad y violencia que se ha desfasado en su gobierno, y cuando lo hace, echa la culpa a Gobiernos del pasado a cinco año de que tomó el poder sin que se vislumbren intensiones de enderezar el barco, por el contrario, cada día la violencia escala en atrocidades, de tal suerte que en los primeros seis meses de este año, según la organización Causa en Común, a nivel nacional se han cometido, al menos, 3 mil 285 crímenes de extrema violencia que pueden ser clasificados como atrocidades, lo que presentan un mosaico de dolor y crueldad que se esconde detrás de las cifras de incidencia delictiva. De acuerdo al tercer informe del 2023 del estudio “Galería del horror: atrocidades y eventos de alto impacto registrados en medios periodísticos”, la organización identifica que de enero a junio de 2023 se registraron un promedio de 18 atrocidades cada día, 24 por ciento más que en el mismo periodo de 2021 y 5 por ciento respecto al 2022. Durante ese lapso se registraron al menos 990 casos de tortura, 473 asesinatos de mujeres con crueldad extrema y al menos 226 masacres, siendo Chihuahua, Guanajuato, Baja California, Guerrero, Morelos y no escapa Veracruz, las entidades más crueles, y aunque AMLO: “Tal vez lloró o tal vez se carcajeo; tal vez gano o tal vez perdió, ahora sabe que fue feliz, que si lloró, también amó, y que puede seguir hasta el final, a su manera”.
Y ES que haciendo la comparativa de las muertes en el mismo periodo en otros sexenios, el actual Gobierno de López Obrador encabeza el registro de dicho delito con 162 mil 658 incidentes, superior al de la Administración pasada, con Enrique Peña Nieto, que anotó 108 mil 124. En el mismo periodo de gobierno del expresidente Felipe Calderón se registraron 85 mil 391 asesinatos, y, en el gobierno del expresidente Vicente Fox hubo 46 mil 506, lo que indica que la herencia maldita de la que tanto habla y utiliza para justificar sus yerros, no fue tan drástica como la que heredará AMLO al sucesor que, en caso de no meterle mano dura al asunto, terminará con el antecesor como un gobierno fallido, aun cuando fuera: a su manera.
PORQUE ANDRES Manuel se mostraba contento el jueves al escucharse replicado en Inteligencia Artificial, cuando su voz comenzó a escucharse en la sala en donde realiza su tradicional encuentro con periodistas, quienes observaron el momento inédito. La letra de la canción pasaba en la pantalla como si fuera un karaoke, sin embargo nadie acompañó a cantar al López Obrador creado por la IA, lo que era contemplado por el jefe del Ejecutivo sonriendo en repetidas ocasiones. Las críticas no se hicieron esperar al comparar la voz del Presidente, la de Vicente Fernández y Frank Sinatra. No es la primera vez que López Obrador termina su encuentro con medios con una canción, pero ese día la sorpresa fue escucharlo a él cantando sumando así una melodía más a su playlist de la conferencia mañanera, a su manera.
Y EN efecto, toda la violencia que registra el País, aunque siga echando culpas al pasado, es responsabilidad únicamente de AMLO y su política de abrazos y no balazos que hace suponer un pacto no escrito en el que se entiende que: si no me tocas no te toco, si me dejas caminar sin riesgo por el País no me meto con ustedes, situación que resultaría egoísta ya que solo protege a unos cuantos, al Presidente, su familia y cercanos colaboradores, mientras el pueblo se encuentra a merced de la delincuencia, lo que comienza a incubar grupos de autodefensas ante la indolencia oficial que trae a los saldados de albañiles construyendo obras faraónicas, a los policías cuidando a políticos morenistas y sus proles, y a los marinos administrando aduanas y aeropuertos, pero no en labores de seguridad como establece la prolongación del permiso para tal efecto. Pero todo eso es: a su manera. OPINA carjesus30@hotmail.com
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