Por Héctor Yunes Landa
¿Qué es lo más grave que le sucede al país en este momento? ¿El vórtice de violencia e impunidad que vive Sinaloa a causa del pacto de abrazos y no balazos, que ha dejado decenas de muertos en las últimas semanas y el secuestro de 165 turistas por parte de la delincuencia organizada? ¿La devastación de Guerrero, por segunda vez en sólo dos años, a causa de la desaparición del Fonden y la incompetencia de los gobiernos federal y estatal de Morena?
¿La estela de muerte que ha dejado 200 mil homicidios, uno cada 15 minutos, durante los últimos seis años? ¿El sexenio con el mayor número de personas desaparecidas y masacres a causa de la violencia criminal? ¿La militarización del país ante el fracaso de la Guardia Nacional y la ausencia deliberada de una estrategia de seguridad pública? ¿El consentimiento de la presencia de la delincuencia organizada y el narco gobierno en amplias zonas de México?
¿El desmantelamiento del Poder Judicial para la ascensión de ministros y jueces afines a Morena para aplicar la justicia conforme a los intereses del poder político? ¿El desfalco brutal de 12 mil millones de pesos en Segalmex, el mayor caso de corrupción en la historia de México?
¿La corrupción en la construcción del AIFA, la refinería de Dos Bocas, el Tren Maya y hasta la mortal línea 12 del metro? ¿La devastación de la selva maya, la mayor reserva natural de nuestro país, para construir un tren turístico que sobrevive con dinero público?
¿La muerte de más de 800 mil personas a causa del criminal manejo de la pandemia (llegaron a decir que el Covid sólo contagiaba a los corruptos)? ¿La muerte de miles de niños y adultos a causa de la escasez de medicamentos contra el cáncer y el desabasto de medicinas y vacunas?
¿Una economía prendida de alfileres, la mayor deuda pública y déficit fiscal en la historia? ¿El crecimiento económico promedio anual de 0.9%, el más bajo desde hace casi 40 años, salvado por las remesas que alcanzan el 3.5 del PIB? ¿Un dólar volátil a causa de las obsesiones personales del Presidente y el precio más alto de la gasolina que supera los 25 pesos por litro?
¿Un país con arcas vacías por la desaparición de los fideicomisos? ¿El brutal desmantelamiento de los sistemas de salud y de educación, donde hospitales y escuelas se caen a pedazos? ¿La desaparición de los organismos autónomos que servían de contrapeso al poder presidencial?
¿Un México aislado de la comunidad internacional por los prejuicios y torpezas del Presidente, que lo llevó a distanciarse de sus principales socios comerciales -EU y Canadá- y confrontarse con España? ¿El desvarío de confabularse y financiar regímenes autoritarios como el de Venezuela, Bolivia o Cuba?
¿La polarización social que alimentó su obsesión por el poder y la venganza? ¿La imposición de una nueva monarquía bananera de apellido López que busca eternizar a la 4T a través del control político de uno de sus hijos? ¿El crecimiento desproporcionado de la corrupción, el nepotismo y el tráfico de influencias?
La herencia maldita de López Obrador será un país en llamas.
Dejará para la historia una forma de gobernar irracional cargada de resentimientos, odios y venganzas, hoy convertida en un perverso Maximato.
La puntita
Este martes, Claudia Sheinbaum toma posesión como Presidenta de México. Hace algunos meses prometió que se llevaría a Cuitláhuac García a su gabinete. ¡Que cumpla su promesa y nos libere de la frivolidad y la incompetencia! |
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