Tiene razón el destacado abogado Juan José Llanes Gil, cuando afirma que en 2018 el Gobierno de la Cuarta Transformación en Veracruz prometió un cambio.
Que quienes arribaron al poder – con el voto de 1.67 millones de veracruzanos que les dimos nuestra confianza - insistieron en que eran "distintos" a los voraces prianistas.
Que ofrecieron que cumplirían la ley, “y que repararían el daño hecho al pueblo por el vicio de no respetar las normas, que fue el sello distintivo de los regímenes del pasado". Y desde entonces no se han cansado de decir que son distintos a los gobiernos “neoliberales”.
No obstante, a través de sus redes sociales el abogado experto en derecho laboral afirma que a casi tres años de distancia, “al menos en lo que se refiere al cumplimiento de condenas judiciales a favor de trabajadores, la cosa sigue (dolorosamente) igual”:
“Sigue intocado el andamiaje legal duartista-yunista, diseñado para violar el Derecho Humano a una Justicia Completa (que comprende, claro, el que las resoluciones judiciales se cumplan)”.
Llanes Gil explica que el andamiaje legal que dificulta el cumplimiento de los fallos del Tribunal de Conciliación y Arbitraje lo construyó el ahora preso Javier Duarte, al reformar la Ley Estatal del Servicio Civil de Veracruz; sin embargo, Miguel Ángel Yunes “que prometió todo enderezar, dejó ese punto de la Ley intocado”, pues para él “también era agraviante que los tribunales condenaran al gobierno a resarcir a trabajadores”, y no le cambió ni una coma.
“Para Duarte – prosigue Llanes Gil - era ofensivo que un trabajador pretendiera reivindicar sus derechos como tal, y más aún, que exigiese que se le reparara el daño. Quizás, en su lógica retorcida, pensaban los duartistas: ¿Por qué habría de pagar el gobierno el monto de condenas judiciales con dinero que bien podrían usar para robárselo?”.
Y agrega: “Quizás en la lógica imperialista y dinástica de los yunistas, se preguntaban: ¿Por qué habría de pagar el gobierno el monto de condenas judiciales (a simples trabajadores) con dinero que bien podrían usar para apuntalar las ambiciones del hijo del gobernador que quiere sucederlo en el cargo?”
En su texto, el destacado abogado en derecho laboral afirma que la pretensión de Yunes de colonizar al Poder Judicial se vio frustrada por el descalabro electoral de su hijo y la consecuente merma de su capital político, por lo que le tocó concretarla al actual régimen.
Y explica: “Incondicionales del actual gobierno despachan en el Tribunal e imparten "justicia" con la única misión de hacer todo lo posible para que el gobierno no "gaste" cumpliendo condenas judiciales”.
“Quizás asumen que no deben incordiar (molestar) a quienes les dieron los puestos (sin mérito visible, más allá de su lealtad a la 4T) o quizás se les haya dado la "instrucción" desde el Poder Ejecutivo (como las que se regocija en recibir la presidenta del Tribunal Superior de Justicia), de que no "molesten" a la Secretaria de Finanzas”.
Es decir, la consigna es “aplicar” la justicia con el mismo manual neoliberal de Duarte y Yunes.
La última parte del texto del abogado Llanes no tiene desperdicio:
“Y a pesar de que el monto previsto en el presupuesto 2021 para el pago de condenas judiciales a favor de trabajadores es el más alto de la historia de Veracruz (casi 2 mil millones de pesos), y de que el año pasado hubo subejercicios, en la misma lógica que los duartistas y yunistas, el actual gobierno decide que lo correcto es ser contumaz a las órdenes judiciales, que no se harán cumplir porque para eso coparon los asientos de quienes imparten justicia”.
“Indigna, claro, saber que víctimas de la imparable violencia (que tampoco ha aminorado) y que necesitan que el gobierno cumpla una condena judicial para tener recursos para poderse ir (literalmente) a otro sitio en donde su vida no esté en riesgo, sean tratados como pedigüeños. Como si pedir que se cumpla un fallo judicial fuera una gracia o una prebenda”.
“A más de no poder descifrar, a dos años del "cambio", qué fue lo que cambió, no me queda más remedio que tener que cuestionarme (como lo tuve que hacer con Duarte y con Yunes), si acaso la lógica de los actuales gobernantes no los lleva a preguntarse: ¿Por qué habría de pagar el actual gobierno el monto de condenas judiciales con dinero que bien podrían usar para campañas políticas que les garanticen seguir en el Poder?”
En la lógica contundente de Llanes Gil, el duartismo, el yunismo y el cuitlahuismo, son iguales.
Son el mismo muro de indolencia y corrupción, lo admitan o no, “porque por más que los actuales funcionarios digan que no lo es (porque lo decidieron ellos, por sí y ante sí), no hay otra forma de llamar sino corruptos a quienes deciden ignorar un requerimiento judicial”.
Así la impartición de la justicia laboral en Veracruz en tiempos de Morena. Una doble violación al derecho humano al trabajo y a la justicia. |
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