En vísperas del Día Internacional de la Mujer no pudo ser más desafortunada la respuesta del recién designado secretario de Desarrollo Social de la administración estatal, Rodrigo Marín Franco, a la diputada federal con licencia y candidata al Senado por la primera fórmula, de la coalición Juntos Haremos Historia, de Morena-PT-PES, Rocío Nahle García. Y es que, independientemente del grado de confrontación que exista entre esa fuerza política y el gobierno del estado, e incluso obviando las formas de urbanidad política, hay una reforma al Código Penal recientemente aprobada por el Congreso del Estado en materia de violencia política, que no se puede pasar por alto. De acuerdo con el Dictamen de la reforma al artículo 367 del Código Penal de la entidad – aprobado apenas en enero pasado – se tipifica como delito la “Violencia Política” cuando ésta se realice por razón de género en contra de las mujeres, - y para acentuar el grado de esquizofrenia o doble discurso, la propuesta fue planteada por el diputado José Kirsch Ramos, del PRD, miembro de la coalición que gobierna la entidad -, y es originada “cuando existen amenazas, coacción, insultos, humillación en contra de las mujeres que participan en la política, se impide su inclusión en campañas políticas, se les niegue o restrinja en el ejercicio de un cargo público y se les presione a dejar sus cargos”. En ese sentido, establece que a quien realice por si o a través de terceros cualquier acción u omisión que causen daño físico, psicológico, sexual, económico o de otra índole, resultado de discriminación por razón de género en contra de una o más mujeres para restringir, suspender o impedir el ejercicio de sus derechos político-electorales o inducirla u obligarla a tomar decisiones de la misma índole en contra de su voluntad o de la ley, se le impondrá prisión de dos a seis años y se sancionará con multa de 9.87 a 197.33 Unidades de Medida y Actualización (UMA). De ahí que habrá que analizar si lo afirmado por el joven titular de Sedesol, en contra de lo dicho por una diputada federal con licencia y candidata al Senado, al referirse a ella como “diputada mitotes”, por sus declaraciones vía Twitter, se encuadran en la hipótesis de la violencia de género. Por lo pronto, está claro que la respuesta del secretario fue, por lo menos, políticamente incorrecta a dos días de la celebración del Día Internacional de la Mujer. |
|