¿Usted es de los que se molesta cuando calificamos al presidente Andrés Manuel López Obrador de ser un vil cretino? ¿Se enoja cuando aseguramos que el presidente de México es un instigador de violencia? Pues mire lo que acaba de decir su presidente, ese que sigue usted creyendo que es un ben hombre. En su conferencia de prensa de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, el presidente informó que Vidulfo González, ante la negativa de diálogo amagó con asistir a los eventos de Claudia Sheinbaum para protestar: “Con todo respeto le pido, convoco al abogado, al dirigente que asesora a los papás, mamás de los jóvenes de Ayotzinapa, que no caiga en actos de provocación, que actúe con responsabilidad, porque ayer yo estaba viendo un video de lo que declara que van a ir a los actos de Claudia. ¿Qué es eso?”. El presidente López Obrador, en lugar de invitar al diálogo, porque eso quieren los padres de los normalistas asesinados, prefiere darles la siguiente recomendación: “¿Qué tiene que ver una cosa otra con la otra? ¿Qué tiene que ver lo de los muchachos desaparecidos, que tenemos nosotros la obligación de atender?, ¿Pero, por qué pasarlo a una candidata? ¿Por qué mejor no a todos los candidatos? A la otra candidata, porque hay otra, y al candidato Son 3. ¿Por qué solo a una?”. Por este tipo de cosas es que calificamos al presidente de México como un vil cretino, cobarde. En el Día Internacional de la Mujer pide que los normalistas vayan y agredan a la “otra candidata”, es decir, Xóchitl Gálvez.
Claudia Sheinbaum no puede dejar de señalar que la corrupción está con la Cuarta Transformación. En discurso señala la transformación afuera, la corrupción adentro
La semiótica es la ciencia de los signos, de los mensajes que transmiten esos signos. Una parte importante de la semiótica tiene que ver con la gestualidad. Una persona puede estar dando un discurso, asegurando que con ella está la verdad, pero sus gestos acusan que se mueve a través de la mentira. Tal es el caso de la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, quien, traicionada por el subconsciente declaró en un discurso “que siga la corrupción”. Por supuesto, ahora tiene más cuidado de los que dice en sus discursos. Sin embargo, si bien en adelante puede refrenar su boca, sus gestos la están traicionando. En un evento de campaña en San Luis Potosí la candidata Claudia Sheinbaum, nuevamente se refería a la continuidad de la transformación que dice encabezar. Entonces preguntó a los ciudadanos de San Luis Potosí: “¿Qué dice San Luis Potosí? ¿Transformación o corrupción?”. En un video que circula sobre este momento se ven los gestos de la candidata de Morena. Cuando dice “transformación” hace un gesto de “hacia afuera”, pero cuando dice “corrupción” el gesto es “hacia dentro”. Sabe Claudia Sheinbaum que con la Cuarta Transformación no se erradicó la corrupción, sino que se hizo más descarada.
Recuerden, el 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer, no es el día internacional de las feministas
¿Es lo mismo ser mujer que feminista? Algunas feministas dirán que sí, muchas mujeres dirán que no. Mi madre es mujer, pero no es feminista, y sin embargo muchas de las enseñanzas que nos ha dado tienen carácter feminista, si como feminista entendemos a una mujer que aboga por los derechos y el respeto que la sociedad patriarcal les ha usurpado. De alguna manera, cada que se acerca el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, muchos ciudadanos, hombres, mujeres, piensan en las precauciones que se deben tomar para que las marchas no les afecten. Muchos deciden mejor no salir de casa por los actos violentos que ocurren y que pudieran causarles algún daño. Ya ni decir del miedo de los comerciantes de los lugares por donde pasará la marcha, porque las feministas se han arrogado el derecho de romper lo que les venga en gana en su afán de manifestar su encabronamiento por una sociedad que lacera sus derechos. Pero pocos, muy pocos piensan en los derechos de la mujer, el derecho a la educación, derecho a la salud, derecho al desarrollo, derecho al trabajo, derecho a la participación política, derecho a una vida libre de violencia, derechos sexuales y derechos reproductivos. La gran mayoría, el 8 de marzo, piensa en el daño que causan unas mujeres embozadas con martillos en la mano, algunas con bombas molotov, potras con aerosoles que usan para hacer pintas o como lanzallamas. Si el objetivo de estas manifestantes es hacernos recordar sus derechos como mujeres, pues han fracasado, porque por nuestra mente son otras imágenes las que cruzan.
Armando Ortiz Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra
|
|