Hoy he leído una nota en distintos medios que me llamó la atención. Javier Herrera Borunda, advirtiendo o acaso “amenazando” que si no es Rocío Nahle la candidata de Morena, el Partido Verde, no entraría a la Alianza de Juntos Haremos Historia.
Reitero que me llamó la atención el leer que el hijo de Fidel cree que ya llenó sus zapatos.
Miles de veracruzanos reconocemos en Fidel a un político con condiciones especiales, que supo hacer valer sus cualidades y logró alcanzar el objetivo de su vida política: ser gobernador.
Sin duda, hay muchos veracruzanos que lo recuerdan con gratitud y, por qué no decirlo, con afecto.
Fidel es un caso especial, como lo es Miguel Ángel Yunes Linares y quizás Dante Delgado, si no da el paso equivocado en esta ocasión.
Pero una cosa es el recuerdo que se tenga del papá y otra, muy distinta y lejana, que el hijo, Javier, pueda con el paquete de usurpar los afectos que se tienen para con el exgobernador.
A simple vista, Javier, alejado de Veracruz y si muy pegado a Chiapas, no puede, ni con Beto Silva y muchos ex colaboradores de Fidel, llenar los zapatos del papá… Javier tiene el pie muy chiquito y la piel muy delgada.
Asi que no creo que en los círculos estrechos de Morena, lo tomen con seriedad y, mucho menos, con temor. En el partido en el poder, van a decidir cómo se tenga que decidir y levantaran la mano a Rocío Nahle, con el respaldo o no de Javier y el Verde, que todos sabemos, es la franquicia más negociable en cada elección.
Ni hablar, así están las cosas. Fidel es un caso especial, Javier, lamentablemente, no. |
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