por
Alfredo Bielma Villanueva
“Mal empieza la semana para quien ahorcan el lunes”, dice afamado refrán aplicable a la fenomenal algarabía que provocó la presencia de Rocío Nahle en el Café La Parroquia ubicado a poca distancia de la Macroplaza donde más tarde daría el banderazo de salida de su campaña electoral. En ese momento quizás en su fuero interno la señora Nahle habría pensado si fue buena idea haber ido a meterse a uno de los reductos más fuertes del panismo en la entidad. Pagó la osadía de su equipo de campaña al llevarla a ese lugar con el bochornoso espectáculo de verla salir de esa cafetería escuchando atronadores gritos en su contra. ¿Qué sucedió? ¿acaso un mal cálculo de sus operadores? Porque si el alboroto fue provocado o espontáneo ya poco importa, pues “palo dado ni Dios lo quita”. Las imágenes profusamente difundidas transmiten una expresión de rechazo social, son elocuentes y, debe suponerse que resultaron muy penosas para la candidata de Morena al gobierno de Veracruz. Por efectos de las “benditas redes sociales” este hecho ya circula por doquier en la entidad y la república mexicana, y no se limitó al “bien venido mal si vienes solo”, de Cervantes, porque además, también se difundieron las adquisiciones de bienes inmobiliarios de la señora Nahle y su esposo en Tabasco y en “El estero” de Boca del Río, con abultado monto cercano a los 60 millones de pesos en el corto periodo de ¡2019- 2020! La combinación de esos testimonios compitió con ventaja sobre la concentración masiva de la Macroplaza.
Ya es a toro pasado, pero ayer comentábamos acerca del arranque de campaña de Morena y asociados en busca del gobierno de Veracruz, precisamente en uno de los bastiones más fuertes del panismo veracruzano, es “como picarle la cresta al gallo”, escribimos, si fue osadía ya obtuvo respuesta inmediata. Pero esto está comenzando, los bandos de la disputa guardan circunstancias muy propias: por el lado de Morena cuentan con la infraestructura proporcionada por el oficialismo, y por el de Fuerza y Corazón por Veracruz con gente muy ducha en campañas electorales y con un buen candidato, Pepe Yunes Zorrilla, de cuya experiencia en estas lides hablan diez campañas de proselitismo siendo el protagonista central. Doña Rocío empieza su tercera campaña electoral, previamente diputada federal y senadora, ambas bajo el amparo de la figura del López Obrador cuando este ofrecía esperanzas, pero ya desvanecidas estamos en oportunidad de saber si ese respaldo será suficiente. También comprobaremos de “cuál cuero salen más correas”, porque, según el teorema de Newton “para cada acción hay una reacción igual y en el sentido opuesto”. Así pues, la jornada del arranque ha sido un juego de suma cero a favor del candidato Pepe Yunes Zorrilla, pero, como en el beisbol, “el último out es el que cuenta”, conseguirlo es lo importante. |
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