En Veracruz ya se ha convertido en formula de formato futurista la salida de un gobernador para convertirse en secretario de Despacho en el gabinete presidencial entrante, tal ha sido un juego especulativo de la comentocracia durante muchas décadas. De Rafael Hernández Ochoa (1974-1980), a quien se atribuía sólida amistad con el presidente Echeverría, se comentaba que el presidente entrante, José López Portillo (1975- 1982), lo invitaría a su gabinete como secretario de Agricultura, obviamente no fue así. A su sucesor, Agustín Acosta Lagunes (1980-1986) las trivias lo colocaban en la Secretaría de Hacienda del presidente Miguel de la Madrid (1982-1988), pero el comentario futurista tampoco se hizo realidad. Fue Fernando Gutiérrez Barrios (periodo 1986-1992) quien rompió la regla, o mejor, el presidente Salinas de Gortari (1988-1994) quien sí invitó al gobernador Gutiérrez Barrios a su equipo de colaboradores ubicándolo en la Secretaría de Gobernación. A éste lo suplió en interinato Dante Delgado (19921994) e incluso no escapó a la opinión especulativa porque no faltaron quienes lo colocaban como funcionario en el gabinete federal, incluso decían que el secretario de Gobierno, Miguel Díaz Pedroza sería su sustituto. Con Alemán (1998-2004) no hubo revuelo alguno porque el presidente Fox era de otro partido, pero con Fidel Herrera (2004-2010) el cuento de la especulación lo llegó a considerar posible candidato priista a la presidencia de la república. A Duarte de Ochoa (2010-2016) no lo favoreció ningún comentario porque tuvo que emprender la graciosa huida cuando sintió la lumbre muy de cerca. Miguel Ángel Yunes Linares (2016-2018) fue gobernador de dos años, y ya es clásico el video donde increpa severamente al ahora presidente cuando andaba en campaña proselitista por Veracruz, obviamente, con ese desencuentro tan abrupto ni modo de pensarlo como colaborador de López Obrador.
Ya puestos en la cruel realidad del momento, ahora que gobierna un partido (MORENA) de corte muy parecido al PRI (dedazos, acarreos a mítines, “destapes”, mando partidista único de control remoto, etc.) aunque “son diferentes” al menos en Veracruz se ha reactivado la especulación en comento, alimentada incluso por el propio gobernador Cuitláhuac García, acerca de que la candidata presidencial de Morena Claudia Sheinbaum lo ha invitado para cuando hipotéticamente ´vaya a formar gobierno. Lo curioso en este caso es que en el quimérico comentario hasta ahora nadie le ha asignado a Cuitláhuac un rango de secretario de Despacho. Calenturas futuristas aparte ya asentados en el complicado contexto político y social de Veracruz, concediendo crédito a la dicha invitación, el gobernador Cuitláhuac García tiene dos expedientes por resolver: 1) entregar buenas cuentas de su gestión y 2) resolver el galimatías electoral en la entidad. De otra manera, como dice el gallego: si no, no. |
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