por
Alfredo Bielma Villanueva
Cuando se hace referencia a la refinería de Dos Bocas (aun inconclusa pese haber sido inaugurada por López Obrador el 1 de julio de 2022), se rememora que una de las promesas del presidente López Obrador consistía en conseguir para México la autosuficiencia energética. El asunto es de interés nacional, pero para la ciudadanía veracruzana cobra especial interés porque la encargada de construirla, Rocío Nahle, aspira a gobernar la entidad, y respecto de esa factoría existen muchos puntos ciegos que estaría bien para la candidata de Morena aclarar y de esa forma quitarse el enorme peso de los cuestionamientos, empezando porque subsiste la percepción de ser una prueba no superada. Rocío Nahle se desempeñó como secretaria de Energía durante casi cinco años en el gobierno federal, desde 2019 el presidente le encomendó la tarea de construir una refinería que produjera 340 mil barriles diarios de gasolina, y a la par modernizar el Sistema Nacional de Refinación para que México pueda alcanzar “la soberanía energética”. Atendieron al llamado de la licitación empresas especializadas en construir refinerías, pero desistieron porque argumentaron que una refinería de las dimensiones de Dos Bocas no era posible construirla en tres años y mucho menos con 8 mil millones de dólares; quienes de eso saben calcularon un costo de 12 mil 500 millones de dólares, por lo menos. Entonces, la ingeniera Nahle asumió el reto y aseguró que construiría la refinería con técnicos mexicanos, pero cinco años después no se refina un solo litro de gasolina y el costo de construcción rebasa el doble de lo originalmente estimado.
A cinco meses de concluir la gestión lopezobradorista la autosuficiencia energética ya tiene rango de utopía, basta un dato: actualmente Pemex produce 4 mil 400 barriles diarios de gasolina Premium, casi nada si contamos que consumimos 121 800 barriles diarios de gasolina Premium, es decir importamos el 96% de lo que consumimos, son cifras de la secretaría de Energía y de Pemex. Un estudio publicado por El Universal señala que Octavio Romero Oropeza, director de Pemex, informó que el déficit de gasolinas en septiembre próximo será del 77%, pero confía en que Dos Bocas, cuando entre en operación, y las refinerías de Tula y Salina Cruz aportarán buenos saldos de gasolina, no especifica si de Magna o de Premium. Allí también quedó a deber la secretaria de Energía porque en un principio anunció que el Sistema de Refinación alcanzaría al 70% de su capacidad, pero en realidad no llega ni al 50%, con esos números la autosuficiencia quedará en veremos. Pese a todo, el pasado 18 de marzo el presidente aseguró: “Se rehabilitó y amplió todo el sistema de refinación y hemos pasado de importar 80% de las gasolinas que consumimos en el país a sólo 30%, y en septiembre próximo únicamente importaremos 6%, casi seremos autosuficientes”, no obstante, los expertos en refinería no están convencidos de que Dos Bocas comience a operar en septiembre próximo. Según el especialista Gonzalo Monroy “la refinería de Dos Bocas va a operar a 100% entre 2025 y 2026” (El Universal on line). Aun más, pese a que la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) calcula que Dos Bocas operará al 100% en 2025, “la entonces secretaria de Energía, Rocío Nahle, aseguró que Dos Bocas estaría refinando a finales de 2023…”, pero de 2024 ya pasó febrero fecha anticipada por el propio presidente para el inicio de operaciones de la gran refinería Olmeca, y nada. ¿Qué pasó? ¿Por qué el largo diferimiento para ver a Dos Bocas como una realidad en México? He allí la cuestión. |
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