Después de meses de no tomar en cuenta a Cuitláhuac García y sus aspiraciones de ser integrado al gabinete de Claudia Sheinbaum, de repente a la presidenta le entró el apuro por anunciar que el ahora exgobernador de Veracruz se integrará a su gobierno, como si alguién con mucha influencia sobre ella le estuviese reclamando que no lo había hecho, que Cuitláhuac quedaría sin empleo a partir del 1 de diciembre de este año, después de entregar la gubernatura.
Tal vez Claudia Sheinbaum no lo quiere incorporar a su gobierno, y se resiste, porque sabe que Cuitláhuac tiene múltiples señalamientos de corrupción y ahora también, de ser un torturador ya enunciado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Con ese antecedente, Claudia Sheinbaum en lugar de darle un lugar en su gobierno, debería de procesarlo, como ejemplo de que no habrá impunidad en su gobierno.
El 2 de diciembre en su conferencia mañanera Sheinbaum aseguró: “No es un tema de operativos o si vamos a seguir con ellos, el tema es el combate a la impunidad, cero impunidad, sea quien sea”.
“Yo siempre dije que la estrategia de seguridad… tiene que ver con 2 ejes centrales que es la atención a las causas y disminuir la impunidad”, dijo.
Pues bien, procesar a Cuitláhuac García sería un buen ejemplo de que en su gobierno no habrá impunidad.
En cambio, incorporar a Cuitláhuac a su gobierno, siendo un torturador ya certificado por la ONU, va en sentido contrario, completamente, porque sería encubrirlo y protegerlo, con un gran y evidente manto de impunidad.
El Protocolo de Estambul es el instrumento internacional derivado de la iniciativa de la Organización de Naciones Unidas, siendo un manual de la ONU para la investigación y documentación eficaces para la comprobación del delito de tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes.
NAHLE OBLIGADA A SANCIONAR A CUITLÁHUAC POR EL DELITO DE TORTURA
En el mismo sentido van las cosas para Rocío Nahle, quien en su toma de protesta del cargo como gobernadora de Veracruz, aseguró que en justicia, cooperará con los diferentes organismos y con el Poder Judicial «para eliminar la impunidad».
De hecho la pelota está en su cancha, porque la denuncia por tortura la presentó Del Río Argudin en octubre de 2022 ante la Fiscalía General del Estado de Veracruz
Más de dos años después, el 20 de noviembre de 2024 del Río Argudin obtuvo de la ONU la emisión del Protocolo de Estambul, validando su queja por la tortura que sufrió en el llamado Penalito de la ciudad de Veracruz, directamente por el administrador de ese lugar, Iván Márquez Lucido, quien en un video dijo que recibía órdenes de Sarahi Peña Galaviz, entonces subsecretaria de Seguridad Pública del Estado, quien estaba directamente a las órdenes del titular de la dependencia, Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla.
Durante todo éste tiempo, desde que se hizo la denuncia pública, el gobernador Cuitláhuac García nunca reacciono, ni siquiera para condenar los hechos o pedir que se investigarán, lo que hace presumir que es verdad lo señalado desde entonces: que a Antonio del Río Argudin lo torturan, si bien no con la orden directa del gobernador, si con la complacencia del mismo, quien se mantiene impávido ante los hechos y después ordena proteger al torturador directo, al grado de nada más cambiarlo de adscripción dentro de la misma SSP.
De hecho en la carpeta de investigación XAL/FIM/FEIDT/308-2022, iniciada ante la insistencia de Antonio del Río por que se investiguen los hechos (insistencia, porque en la Fiscalía del Estado se resistían a hacerlo), se menciona que la infraestructura de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) está a las órdenes del gobernador, que en ese entonces era Cuitláhuac García.
Con los elementos que existen, comenzando por la denuncia de Antonio del Río y con la comprobación de la tortura por parte del Protocolo de Estambul, Rocío Nahle debería de presionar a la Fiscalía del estado para que actúe ya contra Iván Márquez Lucido, como el torturador directo, contra Sarahi Peña Galaviz, por transmitir la orden, contra Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, por dar la orden o tolerar los hechos, y contra Cuitláhuac García, por ser la probable fuente original de la orden de tortura, o el encubrimiento y protección contra sus subordinados, al grado de permitirles seguir en sus funciones aún cuando era evidente su participación en el delito contra los derechos humanos de Antonio del Río Argudin.
SHEINBAUM QUIERE LLEVAR A SU GABINETE A UN TORTURADOR SEÑALADO POR LA ONU
El 9 de febrero de 2022, Del Río Argudín fue detenido acusado de fraude y fue internado en el Centro de Detención Preventiva de la ciudad de Veracruz, conocido como “El Penalito”, donde permaneció cuatro meses detenido.
Después de ese lapso lo liberaron, porque no le pudieron comprobar el supuesto delito, “porque no existio”, puntualizó Antonio del Río.
Ya había saña en su contra.
A diferencia de la mayoría de los casos, donde pasan meses y años sin que haya acción alguna, en lo correspondiente a Antonio del Río se siguió una tendencia que se tuvo en el gobierno de Cuitláhuac García contra quienes consideraba sus enemigos políticos: las detenciones inmediatas.
La denuncia se puso el 8 de febrero, la orden de aprehensión “mágicamente” salió el mismo 8 de febrero y el 9 del mismo mes, a las 9:30 de la mañana “me detuvieron en el palacio municipal de Veracruz” y de ahí lo llevaron a El Penalito, un módulo de prisión preventiva de 72 horas, en el que lo tuvieron 4 meses.
Ahí fue donde lo torturaron.
Pero la tortura no fue por eso, ni siquiera por un supuesto mal comportamiento en ese lugar, si no “por ser panista”.
Eso fue lo que le dijo directamente Iván Márquez.
La tortura existió, hoy no la pueden negar.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través del protocolo de Estambul, confirmó que del Río Argudín, fue torturado durante su detención en el puerto de Veracruz en 2022.
Del Río Argudín, celebró la resolución del organismo internacional y aseveró que «la inacción del exgobernador Cuitláhuac García alimenta una percepción de impunidad y complicidad, además, evidencia su incapacidad para garantizar justicia y respeto a los derechos humanos».
Y esa es la persona que Claudia Sheinbaum quieren incorporar a su gobierno como funcionario.
«Fui torturado no por la delincuencia organizada, sino por la delincuencia institucionalizada dentro del gobierno de Cuitláhuac García. Esto es abuso de autoridad y debe ser castigado», insistió Del Río Argudín.
Como secuela de la tortura, de más de 40 tablazos, Antonio del Río sufre de una “protusión discal” crónica que afecta su calidad de vida. La “protusión discal” es un desplazamiento del disco intervertebral fuera de su posición normal y sobresale hacia el canal espinal, lo que puede presionar los nervios cercanos y causar dolor.
PARADOJA DE LA POLÍTICA: CUITLÁHUAC ORGANIZÓ UN FORO CONTRA LA TORTURA QUE INAUGURÓ NAHLE Y AL QUE ASISTIÓ SHEINBAUM
El 24 de octubre de 2016 se realizó un foro sobre la tortura en la Cámara de Diputados federal, en el cual firmó como organizador Cuitláhuac García Jiménez, que entonces era diputado por Morena.
Ese foro, denominado “La tortura, práctica recurrente en México” fue inaugurado por Rocío Nahle García, en su carácter de coordinadora de los diputados de Morena.
En ese evento Rocío Nahle destacó la importancia de que los derechos humanos sean en México un asunto prioritario, ante los "niveles inimaginables que ha escalado la violencia", de acuerdo con la información oficial emitida.
A la inauguración del evento asistió también la hoy presidenta de México, quien entonces era la Jefa delegacional de Tlalpan.
Así pues, en congruencia, tanto Sheinbaum como Nahle deberían actuar contra Cuitláhuac García, por el delito de tortura, en lugar de encubrirlo incluso dándole nuevas posiciones de gobierno y de poder.
(Si quiere usted ver el cartel de ese evento, el anuncio del comunicado sobre el mismo y la foto oficial en la que aparecen Nahle y Sheinbaum, las puede encontrar en https://cutt.ly/meXYV3Nd )
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