La iniciativa para reducir las prerrogativas a la mitad y aumentar el porcentaje electoral del 3 al 5 por ciento a los partidos políticos en México, no es ninguna idea descabellada, ya que, irónicamente, el 80 por ciento de la población apoya a esos partidos que, instauraron el presidencialismo en México, rindiendo pleitesía al mandatario nacional en turno con máximas como: “las que usted diga señor presidente” y a su vez, permiten la entrega de millonarias cantidades a unos 8 institutos políticos. Hoy, eso podría acabar y dejar sólo a tres en el país: El Verde Ecologista de México (PVEM), el Partido del Trabajo (PT) y al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena); claro, porque son los que van en alianza, de lo contrario, sólo quedaría el Morena. Paradójicamente, Morena es un partido de reciente creación (fundado en 2014) – más o menos cinco o casi cinco años de existir- y que hoy, viendo hacia el futuro y conociendo algo de historia, se está despedazando internamente y a como se ven las cosas, su contienda por las dirigencias nacional, estatales y municipales, se va a judicializar. Esto ocurre porque, “los Padres Fundadores”, no piensan, NI quieren dejar el control de un partido que, les está generando jugosos dividendos económicos y también políticos, como al Partido Revolucionario Institucional (PRI). Si recuerdan la historia de éste, nació en 1929 y aproximadamente hasta el año 2000, tuvo 71 años de control total en el país; en 1939 nació el Partido Acción Nacional (PAN), con el apoyo del clero y empresarios, en franca oposición al PRI y logró, con no muy buenos recuerdos, poner a dos presidentes de la República. Ambos partidos, como ya lo hemos padecido, instauraron la era del neoliberalismo, pero con tan mala práctica, que hizo, se dilapidaran varios miles de millones de pesos que hoy, tienen a ese 80 por ciento de la población que los apoya, en condiciones de pobreza, pobreza extrema, marginación y miseria. Hoy, tristemente vemos, con la elección interna de Morena, que la historia, desgraciadamente, puede o tal vez, está por repetirse, sólo que ahora, podría ser en condiciones, terriblemente desastrosas ¡Hasta para quienes ostentan el poder económico! Y ya que hablamos de repetir la historia ¿Qué va a pasar en el PRI? El gobernador con licencia Rafael Alejandro Moreno Cárdenas se impuso a Ivonne Ortega y Lorena Pignón, en la elección nacional pero, hasta el cierre de la elección el pasado domingo, no había ninguna denuncia por escrito, todo fue a través de las redes sociales, ahora, con las denuncias públicas de que los dados estuvieron cargados hacia Moreno Cárdenas y que tendrán cuatro días para hacer ante las instancias correspondientes ¿El PRI va a avanzar o terminara, tristemente, en merititito recuerdo?
Nos cuentan que, en el Estado y gobierno de Veracruz, muchos son lobos que llegaron al poder con Morena vestidos en piel de oveja e incluso, lobos descarados, pero famélicos, que pudieron, gracias a sus argucias políticas o afinidades familiares, colocarse dentro de cargos importantes en la administración pública estatal y así, por citar un ejemplo, Eleazar Guerrero Pérez, primo del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, ocupa la subsecretaría de finanzas y desde ahí, nos comentan con cierta tristeza, quita y pone gente en el gobierno del Estado, a su antojo y conveniencia, es por eso que cuentan que, designó como director de Tránsito a José Antonio Camps Valencia, en contubernio con el titular de seguridad pública, Hugo Gutiérrez Maldonado y juntos, nombraron a Julia Vázquez en la subdirección operativa de dicha dependencia, con el fin de que, dicen, “nadie más” se entere de lo que se recauda, por “infracciones sin papeleta” – ahí pal chesco- que, a decir de muchos elementos, suman muchísimo dinero, hay quienes dicen, son varios millones al año. Hay quienes aseguran que, lo recaudado en las delegaciones y sub delegaciones de tránsito, varía de los 30 a los 100 mil pesos mensuales, para que tenga usted una idea. Lo anterior incluye: Concesionarios de grúas, transportistas, taxistas, empresas refresqueras y cerveceras, por mencionar algunas. Controlando todo de una forma ortodoxa aunque poco convencional, en toda la entidad. Por ejemplo, en Coatzacoalcos, nos cuentan: Los patrulleros están obligados a entregar 6 mil pesos a la semana, los que operan con radar, 11 mil; en el turno de noche, se entregan 12 mil semanales; los peritos deben entregar 14 mil; los oficiales de infantería, es decir, los de a pie, 2 mil quinientos cada uno; los encargados del operativo “doble fila”, es decir, las grúas concesionadas, deben entregar 15 mil semanales. Lo anterior, sumado, da un total de 174 mil pesos SEMANALES que salen de la delegación de tránsito en Coatzacoalcos, TODO, nos cuentan, bajo el conocimiento y supervisión de Eleazar Guerrero Pérez y según lo que dicen algunas gentes en tránsito. Lo anterior, aseguran, no incluye ni a los operativos con el alcoholímetro, ni a las empresas que participan en los mismos, y mucho menos, los permisos o descansos en domingo para los elementos que cuestan 500 pesos ¡Por elemento! ¡Sólo Coatzacoalcos! ¿Se imagina cuánto se recauda en todo el Estado?
Ya de pasadita y para cerrar, todos nos enteramos de la detención de Rosario Robles, le dictaron prisión preventiva, después de vincularla a proceso por el delito de ejercicio indebido del servicio público, un cargo que en México se castiga con hasta siete años de cárcel. Pero eso no es lo importante, sino que, el trasfondo de las cosas es, como dice el cuento, que no es indio el que no se venga y detrás del caso de Robles, se está castigando la traición y la deslealtad ¡Que plato tan frío se están echando!
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