El primer contacto que tuve con esta extraordinaria persona, fue cuando es nombrado Director General de la recién creada Dirección General de Enseñanza Media del Estado, cuando es separada de la Universidad Veracruzana, siendo Gobernador del Estado Don Rafael Murillo Vidal dependencia ésta, en donde yo prestaba mis servicios, posteriormente tuve la fortuna de ser su alumno en el Facultad de Derecho de la U.V en donde impartía la materia de Derecho Procesal Laboral, esto en el año de 1969 cuando yo cursaba el 5° año de mi carrera para obtener el título de Licenciado en Derecho.
Laborando normalmente y cumpliendo con mis responsabilidades fui llamado a la Sub Dirección Técnica a cargo del Maestro Arturo Esperón Villavicencio, quien me propuso aceptara el nombramiento de Secretario de la Escuela Secundaria y Bachilleres Nocturna de Orizaba, acepté las condiciones laborales ofrecidas y trasladé mi domicilio a la citada ciudad, en donde radiqué por cuatro años, para después cambiar mi domicilio a Coatzacoalcos por lo tanto el contacto con el Lic. Rubén Darío fue muy escaso.
Al retornar a Xalapa ocasionalmente nos saludabamos, siendo hasta el gobierno del Lic. Miguel Alemán que tuve conocimiento que se encontraba trabajando con el Lic. Juan Maldonado Pereda en la Secretaría de Educación del Estado teniendo a su cargo la Dirección de Protección civil, reiniciamos nuestra relación de amistad de acuerdo a nuestros espacios encontrándonos algunas veces e intercambiando comentarios de actualidad.
En el siguiente sexenio encabezado por el amigo de ambos Lic. Fidel Herrera Beltrán, le son encomendadas diversas actividades que realiza con la diligencia
y capacidad que le han caracterizado a través de su fructífera vida, el Sr. Gobernador tiene a bien designarme al inicio de su gobierno Sub Procurador de Asuntos Indígenas de la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, dependencia en donde permanezco hasta el mes de noviembre del año 2006, en ésta fecha le hago entrega de la Sub Procuraduría a mi amigo Rubén Darío, en tanto que yo soy designado Director fundador del Instituto Veracruzano de la Defensoría Pública.
Desempeñando dicha encomienda recibo de parte de la AECI Asociación Española para la Cooperación Internacional, una invitación para asistir al primer Encuentro sobre Defensa Legal de los Jurídicamente necesitados a la ciudad de Cartagena de Indias Colombia y como el tema estaba relacionado con los indígenas me permití invitar al Sub Procurador de Asuntos Indígenas, Lic. Rubén Darío Mendiola, quien a su vez invitó a otro extraordinario amigo el siempre bien recordado Lic. El “Chato” Ortiz, en dicha ciudad tuvimos oportunidad de participar en diversas actividades académicas y establecer una excelente relación de amistad con el Sr. Lic. César Esquinca Muñoa, en ese momento Director de la Defensoría Pública Federal.
Como podrán observar existía una gran amistad y cercanía entre nosotros, sin embargo yo ignoraba otras de las valiosas facultades de mi amigo como el que fuera un extraordinario poeta y declamador.
Hace unos días recibí la invitación de parte del Lic. Alberto Sosa Hernández,
ex Presidente del H. Tribunal Superior de Justicia del Estado (todavía se le podía poner la H. de Honorable) para desayunar con él, respetuoso como es me consultó si podía invitar también al Lic. Rubén Darío, quien había sido su Secretario Particular, a lo cual le manifesté que sería una gran oportunidad saludar a tan apreciado amigo.
A la hora y día indicados acudimos al Restaurante “Casa de Campo” ubicado en la carretera antigua a Coatepec, y degustamos un buen desayuno y mejor charla de tantos recuerdos y anécdotas de nuestra vida laboral, académica y social.
La plática la llevó Rubén Darío, hacia la literatura las letras y las artes, hablamos de poetas, compositores, escritores, declamadores tanto locales como de
otras latitudes, y es el Lic. Sosa quien le pide a Rubén que nos declame algún poema de su inspiración así lo hace y tuvimos ocasión de escuchar el siguiente poema titulado ETAPAS DE LA VIDA, aclarándonos que lo escribió en verso libre, mismo que dice así:
Niñez, adolescencia mayoría de edad, juventud, adultez, madurez.
Como fue que pasaron que no me di ni cuenta, a qué velocidad volaron o corrieron, pareciera que lo hicieron a velocidad de la luz, casi, a 300 millones de kilómetros por segundo; no, no sé, si tal ves, tan solo comparable a un abrir o cerrar de ojos y, ahora la vejez, vejez, que también pasará como otro pestañear.
¡oh etapas de la vida! cabalgaron montadas en el corcel del tiempo, hoy son recuerdos, todas pasaron, se sucedieron, unas tras otras, apenas, como un simple amanecer, atardecer, anochecer, como un simple ayer.
A mí en lo personal me gustó mucho éste poema, también me envió otro de su autoría que se llama la” fiera domada”, excelente, siendo este un relato de la entrega apasionada de una pareja, de carácter erótico requiero la autorización de su autor para publicarlo.
Xalapa, Ez., Ver. Junio 22de 2022
° Vice residente de Colegiados del Derecho en Defensa de la República A.C.
“Todo el esfuerzo por México” Sugerencias: 1942mapes@gmail.com mario.ulises.p@hotmail .com |
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