Comentamos en la colaboración anterior qué en el desempeño de la delicada función de procurar justicia, se requiere personal especializado en la materia, pero también, debe estar investido de una preparación acorde con los tiempos, ética, de conciencia, lealtad, honestidad, trabajo y humanización, a fin de poder actuar eficiente y adecuadamente para atender a las victimas de un delito.
Es inconcebible que en pleno siglo XXI cuando ya hemos avanzado mas de dos décadas, los reclamos de la sociedad, en parte por la inseguridad que padecemos, debido a que la delincuencia organizada tienen presencia prácticamente en todo el territorio nacional con la complacencia de las autoridades tanto federales como estatales y municipales, ocasionándose además por el manejo deficiente en la implementación de las investigaciones ministeriales, cuyo origen es precisamente el bajo nivel de especialización con que cuentan los encargados en la materia; no es posible que tanto delincuente salga en libertad por las ya remarcadas irregularidades en la integración de la investigación ministerial, bien sea por ignorancia o por complicidad agravándose éste tema en el fuero común en donde se carece de casi todo lo necesario.
Valga el ejemplo de los Servicios Periciales, donde los llamados peritos son todólogos, pues lo mismo evalúan un terreno rústico, que una joya valiosa o intervienen en un accidente automovilístico para cuantificar los daños, o también tasan a un semoviente cuando en realidad se requieren expertos criminalísticos como policiólogos, victimólogos, grafólogos, especialistas en tránsito terrestre, en balística y en tantas y tantas materias que tienen que ver con loa comisión de un delito.
No basta únicamente con ser Abogado es necesario contar con la especialización que debe de abarcar desde el personal de intendencia, los jefes de departamento, policías, ministeriales, fiscales, y hasta el propio Fiscal
General, para lograr lo anterior tendría que crearse un departamento que dependa de una Fiscalía especial, ajena al Instituto de Formación profesional, dado que es en éste rubro, donde se tendrá que tecnificar a los servidores públicos a que hemos hechos referencia.
Los beneficios que se obtendrán serán precisamente en cuanto a la agilización, pronta, real y evidente, respecto a la conformación de las investigaciones ministeriales, de aquellas que tengan que consignarse a las que haya que archivarse o bien, las de no ejercicio de la acción penal; esto es que la actividad de la procuración en este primer nivel será más directa y más práctica, acabando con el burocratismo, y el derroche de tiempo en contra de las víctimas cuando acuden a estas instancias a denunciar un hecho, dando por resultado que un técnico especializado, actuará con mayor cuidado y atención en la recaudación de los elementos o medios de prueba para la estructuración del tipo penal, quitando todos aquellos vicios anquilosados de exigir pruebas que no tienen relación directa con el caso que se está denunciando.
Para lograr esta agilización práctica se hace necesario tener como guía la creación de un formulario sobre averiguaciones o investigaciones previas , respecto del catalogo de delitos en materia del orden común o federal, cuyo propósito legal en este sentido será el de establecer un criterio lo más justo y apegado a la ley en la materia en la conformación de la investigaciones para el delito o delitos que establece el Código Penal, en otras palabras, bajo éste formulario se establecerá mínimamente el esquema que deberá seguir el policía para perseguir y detener al delincuente, además tendrá conocimiento del manejo de las investigaciones e incluso , con o sin detenido que pudiere llevar a cabo en unas cuantas palabras capacitar a la policía.
Para el Fiscal sería el modelo, si no ideal el mas próximo para investigar, recabar medios de prueba, sintetizar declaraciones imputativas y conformar su averiguación en términos dinámicos y legales.
Una tercera consideración sería la creación de contralorías, o direcciones especializadas para el seguimiento de la procuración de justicia.
Esta innovación tiene que darse bajo el postulado de que esta nueva figura tendrá bajo su responsabilidad la función de vigilar, observar, orientar, conformar y darle seguimiento a todas y cada una de las investigaciones ministeriales, con el único fin de evitar anomalías buscando romper con los vicios anquilosados de lazos de parentesco o de familiaridad para la protección de alguna de las partes al momento de realizar la integración ministerial.
Por último una cuarta consideración sería la integración de una red nacional informática sobre procuración de justicia, a fin de establecer un marco más globalizado respecto al tema tratado, logrando así una agilización y aplicación de la ley. Si bien es cierto que hasta ahora únicamente se tienen consideradas como fuentes reales del derecho a la ley, la costumbre, la doctrina, los principios generales del derecho y la jurisprudencia, dada la importancia que reviste la informática ya puede ser considerada como una fuente real más del derecho.
Tenemos que estar conscientes que la aplicación de la propuestas realizadas, requieren la inversión de un costo económico considerable, pero es necesario, urgente y vital dado que en este naciente siglo cuyos fenómenos sociales la nueva dinámica de la delincuencia en muchos de los casos, está basada en delitos informáticos; en consecuencia la pretensión es que bajo esta red nacional computarizada sobre el sistema de procuración de justicia se tengan las herramientas adecuadas y suficientes para hacer frente a la creciente delincuencia y brindar realmente a la ciudadanía seguridad en sus bienes y sus personas.
Quiero aprovechar éste espacio para hacer un sentido recordatorio para una serie de grandes amigos que en el transcurso del año se nos han adelantado, Lic. Pastor Murguía González, uno de los fundadores del Mocev por los finales de los años 50s, excelente político dos veces Diputado federal y magnifico orador.
Lic. Felipe Majul Domínguez excelente amigo destacado Abogado litigante y eficiente funcionario de la Fiscalía del Estado durante varios años.
Lic. Jesús Salas Lizaur Notario Público en Coatzacoalcos, quien me dio la oportunidad de colaborar con él y aprender muchas disposiciones del Notariado.
Lic. Miguel Baltazar Vázquez Notario Público excelente persona y buen político fue Diputado a la legislatura local, maestro y excelente amigo.
Lic. Bruno Monroy Guzmán ex compañero de ilusiones en las épocas estudiantiles del Mocev, eficiente funcionario de educación y magnifico amigo.
Arzobispo Hipolito Reyes Larios, guía espiritual de muchos veracruzanos persona de noble corazón siempre dispuesto a brindar su ayuda a quien se la solicitaba, en lo personal guardo un magnifico recuerdo compartiendo una extraordinaria comida ofrecida por mi amigo su tío el Sr. Lic. Antonio Larios Pastrana, platica amena ambiente extraordinario, mi sentido pésame a su hermano mi amigo de muchos años Maestro Melitón Reyes Larios.
Que todos ellos descansen en paz y para sus familiares mi deseo sincero que la resignación llegue pronto a sus corazones y la tranquilidad a sus almas.
Bibliografía: Procuración y Administración de Justicia Reformas y Modernización de Dr. Jesús Martínez Garnelo editorial Offset Universal , S.A. México 1999 quinta edición.
Vicepresidente sur de Colegiados del Derecho en Defensa de la República A.C. “Todo el esfuerzo por México” Sugerencias: 1942mapes@gmail.com mario.ulises.p@hotmail.com |
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