Dadas las evidencias; y sin temor a equivocación de ninguna especie, o sea, la neta, se puede decir que el servicio de inteligencia del señor Presidente, es decir, los espías con charola que le dan información privilegiada para sus otros datos...
Tiene que despedirlos. Porque lo mismo y lo andan embarcando en noticias falsas o atrasadas, para hacerlo quedar mal. Como la que acaba de “mañanear”. Pues recién se enteró, lo que justifica plenamente su indignación y decisiones, que ¡El Pentágono nos espía!...
Eureka Eureka, diría Arquímedes (287 - 212) el increíble polímata griego, e inventor, cuyos principios sobre la Física rigen hoy en día. “Dadme una palanca y moveré al mundo”. Solía decir el ilustre matemático. El Tornillo que lleva su nombre, le facilitó al hombre el cultivo de la tierra...
Pero regresemos con el Señor de los otros datos, que, después de presumir ser el hombre más enterado de México; ya no se entera de nada. Nos han espiado desde siempre, no solo el Pentágono, la DEA, la CIA y los que le siguen...
Todos tienen su propio servicio, al qué eufemísticamente hablando, le llaman de inteligencia; pero son viles espías. Y lo mejor, es que se espían unos a otros. No obstante, ser espía, creo que es una profesión en decadencia, porque ahora se espían las computadoras...
Ya no es lo mismo. Se perdió la emoción que muchos y muchas hubiéramos querido vivir. En lo personal, me habría encantado ser espía...
Para que mis tres amables lectores, se vayan dando una idea de cómo es esto del espionaje, palabrita que a todos horroriza. Ahí en su internet, pongan avión ruso de pasajeros supersónico, y les va a aparecer un avión casi igualito al Concord franco-británico, solo con pequeñas aletas frontales; y voló antes que el Concord. En aeronáutica los rusos están a la vanguardia...
Y si eso hacen a esos niveles, donde se fusilan todo; pensar que necesitan la autorización de un juez para intervenir teléfonos, o sea, para espiar, es francamente infantil; si de lo que se trata es precisamente de que nadie se entere...
Pero que el Presidente decida que, por seguridad nacional -ora trae la psicosis de la seguridad nacional- toda la información de las Fuerzas Armadas será reservada, pero sin decir cómo le va a hacer para que no suceda esto y saquen a la luz todo lo que falta...
Pero lo mejor es cuando continuó...
Porque dijo que estaba ¡sintiendo! que el Pentágono quiere violar la soberanía de México y tiene un plan injerencista, para el que utiliza a la Prensa. En pocas palabras, ya siente pasos en la azotea; y es cierto, no es alucinación. Pero ya es tarde. Vienen por el Cártel de Sinaloa; y en un descuido, también se pasan a llevar a quién los protege. Ahora bien...
Dadas las condiciones que prevalecen ¿creen sinceramente, mis tres amables lectores, que el Presidente va a poder designar a su sucesor? La corcholata y los corcholatos están perdiendo el tiempo y tirando el dinero, nuestro dinero, a la basura...
En el contexto mundial, México está junto a EE.UU. y de ninguna manera podrán permitir que China y Rusia le coman el mandado en Iberoamérica, como ya lo están haciendo; y más ahora que en los comicios se ha sentado en la mesa nuevos jugadores muy poderosos, los hackers...
Que tienen información suficiente para hacer pedazos a cualquiera; como los viajes del General y la austeridad republicana. Y se deduce, que lo mejor se lo están reservando para la recta final; o para que mejor se entienda allá en Palacio, para la novena entrada.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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