“En México no se fabrica el fentanilo”, dijo enfático el señor Presidente López Obrador; para acabar reconociendo, después de las evidencias que le presentaron en las visitas que cortésmente le hicieron los enviados de Washington, que siempre sí se fabrica; “pero poquito”...
Todavía resuenan las patrióticas palabras, cuando desde su atril aseveró que “A México se le respeta” y que nunca permitirá la entrada de tropas al territorio, como lo proponían los republicanos...
“Es un insulto, una falta de respeto al pueblo. A nuestra independencia, a nuestra soberanía
Hasta que operó el ya clásico “copelas o cuello”, que algunos interpretan como abrir los expedientes en contra de él y de sus hijos, que finalmente terminó en un: ¡por las buenas o por las malas! y el Presidente tuvo que aceptar, que siempre sí entrarán; pero que fueran solo 11...
El porqué del número, se ignora, pero ha de ser un escuadrón de élite, pues traen armamento, municiones, material y equipo especializado. Pero solo para dar entrenamiento especial a las Fuerzas Armadas; y por un tiempo definido...
En el entendido, de que, a estos marines, a diferencia de los médicos cubanos, que vienen a más o menos lo mismo, no se les va a pagar nada; ya que su entrenamiento será por cortesía de La Casa Blanca...
En ese entonces, al Partido Republicano el Presidente mexicano, le llamó “intervencionista, inhumano, hipócrita y corrupto” -su señalamiento favorito; como si él no lo fuera. Y además los amenazó con iniciar una campaña para que todos los latinoamericanos no voten por ellos. Sin darse cuenta del problema en que se estaba metiendo; y en el que ahora ya está hasta el cuello...
Hace poco en este mismo espacio recordé las palabras de George Washington (1732 - 1799) “Cuando un pueblo se ha vuelto incapaz de gobernarse a sí mismo y está en condiciones de someterse a un amo; poco importa de dónde proceda este”...
Si bien es cierto que, a menos de que se esté enterado de los hechos, nadie puede hacerse responsable de lo que hagan los familiares. Con relación a lo que hagan los hijos, ya es otra cosa...
Como viene siendo el caso del Presidente López Obrador y sus hijos. O como viene siendo el caso de la Candidata Xóchitl Gálvez y su hijo Juan Pablo. Toda vez que denota el poco control que tiene sobre sus hijos y la clase de educación que han recibido...
De nada sirvió que su mamá lo cobijara “mi hijo se disculpó y asumió los costos”. “Es parte de la guerra sucia”. Ahora sabremos si ella asumirá los costos de tener un hijo que, si siendo ella senadora, se comporta de esa forma y con ese vocabulario -que parece ser de uso familiar- no tendría nada que envidiarles a los hijos del Presidente, si ella lo llegase a sustituir...
No obstante; ante los hechos, que, de una u otra manera, pero ya está el Ejército yanqui en el territorio nacional, hay quienes se preguntan, si podrá Washington dejar que en su frontera continúe un narco gobierno.
Ya de salida...
El Presidente Joe Biden y su homólogo mexicano tienen cosas en común. Ya se les va el avión. El estadounidense dice que no firmó un documento que llevaba su firma por lo que el presidente de la Cámara de Representantes comentó que “es muy probable que ya no sepa ni lo que firma”. Y el mexicano aseguró que la jornada electoral y transición presidencial, serán tranquilas. Algunos piensan que al paso que vamos, ya no va a haber candidatos.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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