Como la humanidad no quiere dejar las comodidades que le da la vida moderna, convertidas en daño al resto de los habitantes del Planeta; y a la Propia Madre Tierra. Tal vez confiados en las absurdas creencias con las que viven, de que finalmente alguien vendrá a salvarlos de la inminente catástrofe…
Creencias que vienen desde siempre. Ya decían que Rama, el profeta indio, fundador del hinduismo; equivalente a Mahoma, o a Jesús, venía a salvarlos del rey Rávana y sus huestes de demonios…
Nada nuevo, solo que él representaba a Visnú. Mahoma a Alá; y Jesús a Jehová. Cada cuál su rollo; pero lo cierto es que ninguno ha salvado a nadie. Y si hemos de ser sinceros, sin que esto represente un reclamo hacia los dioses -no vaya siendo que se enojen, pues, sabido es que tienen un genio endemoniado- cada vez estamos peor; y por consiguiente el futuro luce muy poco halagüeño, por no decir que desastroso…
Pero, así como no quieren dejar las comodidades de la vida moderna y que se frieguen los demás; tampoco pueden dejar sus anacrónicas creencias, fincadas todas en la esperanza de una salvación…
Y como es más que evidente que no han salvado a nadie; entonces los charlatanes salen con que la salvación es para la otra vida. Vida que, además, nadie conoce. Pero inexplicablemente la gente les sigue creyendo sus vaciladas…
“Nada se cree tan firmemente, como lo que menos sabemos” Michel de Montaigne (1533 – 1592)
Por lo que ofender al divino, o a la divina, es imperdonable y merece todo tipo de calificativos. Empezando por el de “apóstata”, que es el que reniega de la religión en la que se haya formado; “ateo”, que es el que niega la existencia de Dios; agnóstico, el que ni niega la existencia, ni la afirma, mientras no sea demostrable. Pero hay más…
Deísmo, que es aquél que cree que Dios creó el Universo, pero que no interactúa; a diferencia del Teísmo, que cree en ese Dios, pero que tiene el control de todo. También se le llama impío, que es quien no demuestra ninguna devoción religiosa o respeto por esas cuestiones…
Y panteísmo, presente de diferentes maneras en el pensamiento hindú, es la creencia de que todo cuanto existe participa de la Naturaleza Divina. Que Dios es inmanente al Universo…
Pero por regla general, todo el mundo cree en un Dios -los budistas no, el budismo no es una religión-…
Por lo que abiertamente insultarlos, es algo que se considera tan grave, que la vida puede ir en ello. O que la gente le dé la espalda. Que seguramente es lo que le pasará al candidato colombiano a la Presidencia de su País, Rodolfo Hernández, por la Liga de Gobernantes contra la corrupción, quien comparó a la Virgen María con las prostitutas…
Y aunque después en repetidas ocasiones y de diferentes formas, se disculpó, hay un vídeo en el que pide perdón a los colombianos por la imprudencia que dijo; pero diciendo que no es lo que quería decir; y que, para variar, los periodistas lo sacaron de contexto. Pero que los competidores le critican todo…
Pero lo cierto es que quedó grabado y dijo: “Yo recibo a la Virgen santísima y a todas las prostitutas del barrio que vivan con ella”. Y aunque ciertamente fue un dislate, un desacierto, el efecto de sus palabras se verán reflejadas en las boletas. Los errores se pagan.
Pero por lo pronto, la invitación está abierta para que nos escuche de 15:00 a 16:00 hrs. en Magia 93.7 de FM; y nos vea por Internet.
Y aquí nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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