Julio Ricardo Blanchet Cruz
diariolibertad@gmail.com
Entretenidos con la tercera ola de los Bichos que, entre el original y sus familiares ya se han cargado para mejor vida a 4 millones de seres que se dicen humanos; cuando ciertamente que no son tantos si se toma en cuenta que El Planeta ya soporta más de 17.500 millones de los mismos…
Pero me pareció interesante buscar entre los que saben, cómo los biólogos, los teólogos, los políticos, qué es lo que significa ser un ser humano. Y encontré muchos conceptos engañosos, pues se refieren a nosotros como a la especie animal más sociable de todas…
Lo que ciertamente es una “mañanera” -término que acabo de acuñar para determinar que algo es solo una puntada, una ocurrencia basada en datos falsos. Pero continúo-…
Yo entiendo por una especie sociable, una que vive en sociedad con otros de su misma especie y conviven en paz. Como los gorilas, las ballenas, los murciélagos y tantas y tantas más que no se andan peleando…
También opinan que somos la única especie que tiene consciencia de sí misma, que piensa y que se comunica con los demás a través del lenguaje y que somos únicos y exclusivos…
Falso. Los animales tienen inteligencia y consciencia de lo que es la vida y la muerte y nosotros ni eso. Una colonia de hormigas no construye puentes por instinto; sino de acuerdo a las necesidades de la comunidad y del momento…
Y una termita es tan distinta de otra, como lo es un ser humano, un tigre, o un orangután de otro de su misma especie que, además tienen huellas digitales; obviamente distintas…
En cuanto a la comunicación entre ellos, es tan real que pueden avanzar sin chocar unos contra otros. Ya para qué les platico amables lectores, quienes fueron los que opinaron que somos los únicos que tenemos alma; pero fueron los mismos que dijeron que las mujeres no la tenían; por si buscan las causas del machismo…
Cuando alma se deriva de la palabra ánima, lo que anima, lo que da ánimo; y no cada cual tiene la suya. Solo hay un alma. El alma que da vida a los gusanos, a los humanos, y al Universo. Además de que el alma no se puede condenar ni salvar; lo que se condena o se salva es el espíritu…
Lo que nunca encontré, fue que alguno reconociera lo que en este espacio siempre se ha dicho y que ahora se repite cada vez más frecuentemente. Que somos unos viles parásitos de La Tierra; y además, por si fuera poco: ¡demócratas!…
Que es un sistema de gobierno tan equivocado, que somos los únicos que disque lo practicamos; ya que es, sin lugar a dudas, el sistema más antinatural que puede existir. Ya me imagino a los elefantes levantando la trompa para saber si van para la izquierda o para la derecha. Absurdo. Nunca se pondrían de acuerdo…
Los animales son guiados por los más viejos, por los más sabios. El problema es que entre los humanos, los más viejos ya están muy enfermos y solo piensan en comer. Solo hay que ver como les crecen las panzas cuando llegan al poder. Y quien come porquerías se llena la cabeza de lo mismo y anda diciendo y haciendo puras mañaneras.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
|
|
