Me imagino la situación que estaría viviendo este país ,- zaherido por la expoliación de que ha sido víctima durante tanto tiempo de la voracidad y rapiña de algunos cuantos - que, aún con el repudio histórico demostrado por la ciudadanía el 1 de julio, en que sepultó a esa oligarquía criolla , ahora se niega a morir y resiste , pero fragua y actúa en la obstaculización al gobierno que representa la esperanza de vivir tiempos nuevos.
Nada se sabría de lo que hoy se difunde en la conferencia mañanera del presidente López Obrador en cuanto a la vida pública de la nación, pues así conocemos que los ministros de la Suprema Corte de Justicia , ante un agandalle brutal, percibían sueldos que, en este país lleno de miseria, podría considerarse como un crimen de lesa humanidad, porque no solo le hincaban el diente al presupuesto, sino que tenía otro cúmulo de prebendas y canonjías que no les avergüenza, en tanto no se imparte justicia en términos de los artículos 1 y 17 constitucional, y se dan un vida de reyes, entretanto, 52 millones de mexicanos viven en el desamparo.
La mejor demostración de la simbiosis que se da entre el poder judicial y los que expolian a la república, está la reciente boda de la hija de un litigante que ha servido a Salinas de Gortari y a otros presidentes de la republica en los negocios más sucios, como es el lavado de dinero y defraudación fiscal , tan es así, que ahora está en la cárcel después de que por mucho tiempo se alentó la impunidad al no darse cauce a las denuncias en su contra, sin embargo, el riesgo está en que, en las ominosas alianzas que existe, razón fundada, que se lleve al fracaso con la invocación de la justicia que implora la nación.
Una clara demostración del contubernio que se da en el poder judicial de la federación es el caso de la ley federal de remuneraciones de los servidores públicos, aprobada por el congreso de la unión y promulgada por el presidente López Obrador, en que se establece que nadie debe ni puede ganar más que el presidente de la república ,por así establecerlo el artículo 127 constitucional, sin embargo, los jueces y magistrados federales y los llamados organismos autónomos la impugnaron y un ministro, Alberto Pérez Dayan, en abierto desacato a lo que prevé el artículo 64 de la ley que reglamenta las acciones de inconstitucionalidad que prohíbe expresamente que se conceda la suspensión de una ley, para que no se aplique la ley y al suspender su vigencia , así se afecta la legalidad ,honradez ,lealtad, imparcialidad y eficiencia , lo que debería dar lugar a juico político y fincarle la sanción respectiva, para demostrar que la ley se aplica a todos por igual.
Dejar pasar por alto la acción del ministro de la Suprema Corte Pérez Dayan , sin consecuencia alguna, lleva a pensar que no estará lejano el día en que, al igual como aconteció con el expresidente Lula Da Silva, un juez- que como premio ahora es ministro de justicia del presidente Brasileño-, lo mantiene en prisión sin prueba alguna y todo por ser un luchador social con gran arrastre y porque sacó de la miseria a más de cuarenta millones de brasileños ,lo que representaba el riesgo que volviera a triunfar en las elecciones,- algo similar al desafuero de que fue víctima López Obrador para consumar el fraude electoral de Fox en 2006 que llevó a Calderón a la presidencia- que es causa y razón esencial de la crisis nacional ante el saqueo descomunal de la nación.
En las relacionadas consideración, tal parece que se quiere constituir la dictatura judicial que detenga las acciones de cambio que la nación reclama, y tan es así los cientos de amparos que se ha promovido en diferentes casos, para impedir que se consolide el gobierno de López Obrador, lo que es inusual y endemoniado porque jamás se dieron tantos litigios contra el gobierno federal , como está sucediendo ahora, sin embargo, el congreso deberá estar “ojo avizor” para detener esta embestida que a todas luces es para crear un clima de intranquilidad, con el manido cuento que se violan derechos humanos, solo que no hay que desconocer la jurisprudencia que la misma corte estableció con el número 293/2011 que señala que cuando exista una restricción en la constitución , tiene que atenderse a ese espíritu, por ello, la ley de remuneraciones que declara la corte como inconstitucionalidad en algunos artículos, debe ajustarlos el congreaso, pero sin abandonar el espíritu constitucional, que nadie debe ganar más que el presidente de la república.
No ha que descuidar y menos desdeñar el propósito transformador del presidente y menos, por supuesto, la resistencia de la minoría enriquecida que no descansará hasta ver que se descarrile el gobierno y tan es así que se oponen a que se quite el fuero a todos los servidores públicos, la consulta para revocar el mandato al presidente y a las demás autoridades, es decir, que no solo se democracia representativa sino participativa, de manera que se terminen las hegemonías de todos los niveles, para des empoderar la corrupción y la impunidad, lastre que durante treinta años lubricó al viejo régimen. |
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