Brenda Caballero
La reciente sorpresa para los que somos de Xalapa, fue el manejo del nombre de Elizabeth Morales García para contender por la capital. Tal vez no hubiera sido sorpresa si hubiera sido por el PRI, pero la versión y las encuestas la ubican en el partido Morena. Con ello, las redes sociales estallaron, principalmente en comentarios negativos y de moral partidista: ¡Cómo una priísta va a ir por Morena! El desgarre de las vestiduras fue brutal porque podemos permitir un presidente, un funcionario, un diputado, un senador, un alcalde, pero... ¿a Elizabeth? ¡pues cómo!
El caso de Elizabeth me recuerda mucho al de Clara Luz Flores, ex presidenta municipal por tres periodos de Escobedo, ex diputada y actual candidata a la gubernatura de Nuevo León. Sí, priísta por 22 años. En febrero del año pasado renunció a dicho partido.
Clara fue favorita en las encuestas de Morena para ser su candidata. De inmediato, un sector de Morena la rechazó, por su pasado en el “pecaminoso” PRI, sin ver que a nivel nacional, Escobedo, el Ayuntamiento que dirigía, estaba en el primer lugar por su administración. Realmente fue una sorpresa, pues muchos y muchas, me incluyo, esperábamos la candidatura de Tatiana Clouthier Carrillo, pero no fue así.
Continuando con Elizabeth, no sería raro que ella dejara al PRI, y no es tema de ahora... ya se veía venir desde hace tres años, cuando a principios del 2018 declaró ser víctima de violencia política por los mismos miembros de su partido. En esa ocasión, ni siquiera la tomaron en cuenta para los cargos de elección popular, para ser precisa por la senaduría, a pesar de su trayectoria política. Afortunadamente los tiempos cambian y hoy para el próximo proceso electoral, las mujeres vamos por el 50 con la paridad total.
Pero dejemos los colores partidistas y veamos sus resultados cuando fue alcaldesa de la capital, que es al cargo por el que podría contender si es que gana las encuestas internas de Morena.
De la revisión a la cuenta pública 2013 (último año de gestión de Elizabeth Morales García) efectuada por el Orfis, y la cual se encuentra en su sitio de internet, en las áreas de tesorería, contabilidad, obras públicas, dirección de ingresos, dirección de egresos, dirección de recursos Materiales y dirección de recursos humanos, no se detectaron irregularidades, como lo muestra el apartado 5. Conclusiones: en la página 317 del mismo “no se detectaron irregularidades que hagan presumir la existencia de daño patrimonial en el municipio de Xalapa, Veracruz ...”
Llama la atención también los números de las gestiones de Morales y su antecesor David Velasco Chedrahui (2007-2010) y sucesor Américo Zúñiga Martinez (2014-2017), pues de los informes Anuales de Gobierno, incluidos los de Morales García (2010-2013), los números de alineamientos otorgados por la Dirección de Desarrollo Urbano fueron superiores, alcanzando su punto máximo en 2011 con 4,480.
Las licencias de construcción fueron superiores en su administración, superando las 1,750 en promedio por año, muy por encima del periodo de Américo Zúñiga.
En 2012, los cambios de uso de suelo alcanzaron los 1307, duplicando y triplicando las cifras de su sucesor y antecesor. Las autorizaciones de fusiones y subdivisiones otorgadas por la dirección de Desarrollo Urbano de Xalapa en 2012 alcanzaron las 217.
Los números no mienten y para los que digan que Morales García no hizo nada por la capital, pues que le echen un ojo a los informes anuales.
Claro, para denostar siempre habrá quien diga y hable mal de su gestión y hasta de su persona, pero los documentos ahí están y hablan de su trabajo.
Ahora, de la posibilidad de que sea candidata de Morena, cosa que los mismos militantes de ese partido se han encargado de propalar, creo que sólo a una persona pudiera afectar: su padre, Eligio Morales, de corazón tricolor al cien por ciento, pero no dudo que apoya y apoyaría a su hija, en Morena o donde fuera, como siempre lo ha hecho.
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