Millones de ciudadanos no saben aún por quién votar. Otros ya decidieron. Y muchos no participarán. ¿Qué ofrecen los candidatos de las tres fuerzas políticas más importantes y qué nos preocupa a los mexicanos?
Seguridad y empleo, sin ser los únicos temas, aunque sí los más urgentes.
Desde hace años la inseguridad se ha agravado y ningún gobierno ha dado resultados. Se tiene la percepción de que funciona un estado dentro de otro y no se ve solución a corto plazo.
En cuanto a desempleo y pobreza, cada día vamos peor: mujeres y hombres se quejan de la escasez de dinero en sus bolsillos. Unos viven “de prestado” y los más “de milagro”.
A ver hasta cuándo continuarán las noticias de asesinatos, robos y asaltos, y las peticiones de “hermano, préstame una lana para poder comer hoy”.
¿Por quién votar? Nadie nos sacará de la pobreza, ni siquiera se paliará el problema de la violencia por arte de magia.
¿No existe solución? Nos planteamos preguntas elementales que ningún servidor público ha respondido a satisfacción: ¿Por qué si México es productor de petróleo, la gasolina es más cara que en Venezuela y Guatemala?
¿Por qué países como Nueva Zelanda, Dinamarca, Austria, Canadá y Singapur pudieron disminuir los índices de corrupción e inseguridad y México no?
Hace dos años, el actual gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, prometió reducir los altos índices de inseguridad a la mitad. No sólo no cumplió, se han disparado.
Eso sí, influyó con sus denuncias para que su antecesor, Javier Duarte, fuera llevado a prisión, y encarceló a varios exfuncionarios públicos señalados por actos de corrupción.
Los gobiernos priistas están tan devaluados y desprestigiados que sus candidatos se disputan con los panistas el segundo lugar en las encuestas, aunque circulan versiones de que PRI y PAN son lo mismo y que al final se unirán en secreto para vencer a su verdadero enemigo, AMLO.
El próximo gobernador de Veracruz será quien convenza a los electores de que es capaz de reducir la violencia y la corrupción, y de atraer inversiones que generen empleos.
Ojalá no sean más engaños, simples y demagógicas promesas de campaña que ningún candidato cumple y por lo mismo, nadie toma en serio.
Ahí están Pepe Yunes, Miguel Ángel Yunes Márquez y Cuitláhuac García.
Quien confíe en cualquiera de ellos, que vote y exija que cumpla.
Lo mismo a nivel presidencial, por Meade, Anaya u Obrador. |
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