Con solidaridad y respeto a Cuitláhuac García Jiménez, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, Ricardo Ahued Bardahuil y Rafael Hernández Villalpando Cómo lo he dicho en otras ocasiones el primer principio de la buena política consiste en creer, aplicar y ejecutar las leyes que tenemos. La gran oportunidad de las sociedades es elegir a quienes hagan leyes que encamen mejor el espíritu de los tiempos. ¿Por qué digo eso? La política es el arte de lo posible y en el arte de lo posible existen los huecos. Pero también sepan que no hay nadie, seguramente los dioses,pero no es el caso,que pueda controlar las dinámicas sociales que se están desencadenando. La palabra bizarro tiene dos aceptaciones. Una que proviene de su origen francés e inglés, que se refiere a una persona extraña, peculiar o extravagante. Otra en español, donde suele confundirse el término que es positivo y quiere decir valiente. En el caso de AMLO, los dos sentidos de la palabra se ajustan perfectamente. Tiene un enorme valor para enfrentar todo y a todos, todo el tiempo. Lo cierto es que mañana a mañana, acto con acto y declaración a declaración, hay casos que ya se pueden entender como definitorias de este tiempo. Los gobernadores del país coinciden en la necesidad de crear la Guardia Nacional. Emanados de Morena, PRI, PAN, PRD y MC coinciden en su mayoría en que la situación de inseguridad en México requiere una corporación integrada por militares, pero advierten que debe quedar claro tanto la temporalidad como el mando civil de este cuerpo. No se debe dejar de fortalecer las capacidades institucionales de las políticas estatales y municipales. Los gobernadores de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez, de Coahuila Miguel Riquelme, Héctor Astudillo de Guerrero, de Baja California Francisco Vega de Lamadrid, de Durango José Rosas Aispuro, de Zacatecas Alejandro Tello Cristerna, de Colima Ignacio Peralta, de Michoacán Silvano Aureoles, de Chihuahua Javier Corral, apuntaron "Hoy en día, la sociedad le tiene gran confianza al Ejército, por lo que la presencia de la Guardia Nacional va a ayudar a darnos certeza a todos". ¿El Presidente que es, un militar, un naval o un civil? Luego entonces, el jefe máximo de las Fuerzas Armadas en los términos de la Constitución es el Presidente de la República, lo que significaría que el jefe de la Guardia deberá ser un civil. "Sí coordinación, no sumisión". Y por último, que escrito está en todos los libros, los sagrados y los otros, que no podemos olvidar que los seres humanos vivimos anhelando, soñando y siempre queriendo mejorar. Yascha Mounk, en su libro más reciente que se titula El pueblo contra la democracia dice que " existen tiempos ordinarios cuando las decisiones políticas se influyen en la vida de millones de personas, pero las características básicas de la vida colectiva no están en juego y hay tiempos extraordinarios, cuando los contornos básicos de la política y la sociedad se renegocian como resultado, los habitantes de estos tiempos extraordinarios consideran que lo que está en juego en política es algo existencial". Hoy es cada vez más claro que vivimos en tiempos extraordinarios. Mounk cree que lo que estamos viviendo es la separación de la democracia y el liberalismo, dos conceptos que casi imaginamos juntos, pero que no lo son, dice él. Para Yascha Mounk, en su libro que consta de nueve capítulos, dividido en tres partes, el populismo actual es precisamente esa democracia iliberal. Voluntad del pueblo que destruye instituciones,
elimina órganos autónomos y expertos, aniquila derechos y anula la ley. Coincide en eso con Platón y Aristóteles, creo, que no eran afectos al término "democracia". Sin disenso no puede haber democracia. La democracia no florece en el encadenamiento de consensos sucesivos. La democracia no es un bloque homogéneo, es una madeja hilada en la discrepancia de los distintos que hay que desenmarañar, dilucidar con la ayuda del debate libre que sólo es posible sin amenazas y sin censura. Si hiciéramos un homenaje al ambiente de discusión actual, viciado por las opiniones vertidas en esa bolsa de gastos en que se han convertido las redes sociales, habría que admitir que en el pasado inmediato también hubo embates contra la democracia y que otros gobiernos tuvieron sus propios espasmos autoritarios. Y continuando con el tema de las Fuerzas Armadas, México lleva más tiempo de una década enfrentando organizaciones criminales que se encuentran entre las más violentas del mundo. Hay violencia porque hay pobreza. Hay altos índices de homicidios porque hay corrupción. Se necesita pacificar el país. Porque ya se ha perdido mucho tiempo con diagnosticar, definir, identificar y llorar. Seamos claros: México es violento en gran parte porque no hay Estado de derecho ni las instituciones que permitan desmantelar la capacidad bélica de las organizaciones criminales. Por eso se necesita la Guardia Nacional. Obviamente con reglas que respetan los Derechos Humanos, con transparencia y fiscalizable, y sí, preferible que el mando sea civil a largo plazo. Porque tenemos que asumir dos cosas: primero, las cosas van a mejor en México eventualmente. Pero no será de un año a otro. Entonces tenemos que preguntarnos si el modelo de la Guardia Nacional permite esa flexibilidad dependiendo de las amenazas. En segundo lugar, también tenemos que asumir que el contexto internacional, las organizaciones multilaterales, las cortes internacionales, eventualmente tendrán un impacto en el funcionamiento de la Guardia Nacional. Si se llegase a usar o no se le diera la supervisión adecuada, uno podría imaginarse que algún funcionario de muy alto nivel tendría que enfrentar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, otras sanciones de la comunidad internacional. Además, hay que subrayar que sería un error iniciar la negociación o amnistía o proceso de pacificación con grupos armados o violentos si no se tiene claro cuáles son las funciones de la Guardia Nacional. ¿Qué capacidad de negociar tendría el Estado mexicano? Aquí la pregunta que tendrá que hacerse en este debate es asegurar la fiscalización y control sobre la Guardia Nacional. Tal vez empezar a contestar la siguiente pregunta, ¿ quién tendría la responsabilidad política y jurídica? ¿ un general? ¿ un comandante de la policía civil? ¿ el secretario de la Defensa? ¿ o el secretario de Seguridad? ¿ o el mismo comandante en jefe: AMLO? Propagar implica presentar una visión del mundo para imponer la a la sociedad, busca construir un sentido de unanimidad de la opinión pública. No implica comunicación política de dos vías. No reconoce la pluralidad propia de las democracias modernas. Combate otras visiones para imponer la propia. Si logra su objetivo, se genera lo que Noelle Neumann llamó la espiral del silencio, fenómeno en la cual la autocensura funcionó entre la población por la necesidad de pertenencia social, y el miedo al rechazo por tener opiniones distintas a la imperante. El más reconocido propagandista del siglo XX, por el éxito que logró en generar una
unanimidad para aceptar al sistema, fué sin duda Joseph Goebbels, una figura de la propaganda política. Los principios de Goebbels están vigentes. Lo cierto es que hoy estamos ante el uso de la propaganda clave para la legitimidad del gobierno, sin acudir a la opinión de los otros, sean adversarios, especialistas, académicos, empresarios, servidores públicos de carrera, inversionistas, en fin. La propaganda difiere de la comunicación política porque la primera difunde una visión del mundo, mientras la segunda reconoce la necesidad de crear consensos en una sociedad plural, que enriquezcan la labor de gobierno. Espero esta reflexión arroje luz sobre los cuestionamientos de analistas sobre el éxito de la comunicación de AMLO, y de la escasa o casi nula respuesta de adversarios o acusados de una situación que se presenta como extrema para justificar los excesos. Estamos pues ante una nueva realidad en torno a la práctica de la política. Ojalá y AMLO reflexione y se convierta en punto de unión en los esfuerzos por mejorar al país. Debemos recordar que antes, como ahora, el país y sus habitantes están primero. Parece claro que la piel se curte y se endurece frente al sol, el viento y el agua. La eterna repetición de un gesto forma una arruga, un surco cada vez más grande. El roce constante y reiterado del mismo esfuerzo crea un callo, una dureza dolorosa. Nos transformamos para protegernos en nuestras pequeñas armaduras que son también los signos de lo padecido. Si pudiéramos, nos doblaríamos hasta hacernos bolita con tal de ya no sufrir con el sufrimiento de otros. Nos hemos cansado de mover la cabeza de un lado a otro, de decir que no. De no creer que las cosas suceden. Pero suceden y por fortuna hay quien las ve por nosotros y las captura para que el mundo que no está cansado y no tiene un callo ni una arruga ni está curtido, se conmueva por nosotros que ya no lo hacemos. Al fin los distintos partidos políticos alcanzaron un acuerdo unánime sobre el tema que hoy por hoy, más nos angustia en este país: la inseguridad. Con 127 votos a favor y ninguno en contra el Senado aprobó el dictamen con el que se establece la configuración de la Guardia Nacional. Estos son algunos de los puntos más destacados: Se determinó que la Guardia Nacional tendrá un mando civil. AMLO podrá disponer del apoyo de las Fuerzas Armadas por un período de 5 años. El mandatario deberá hacer uso del Ejército y la Marina bajo parámetros de convencionalidad. No se modificó el artículo 13 dela Constitución. Se eliminó la figura de la "Junta de jefes de Estado". En su lugar habrá una coordinación operativa interinstitucional. La Guardia Nacional se regirá por una doctrina policial. Se expedirá reforma a la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Ley de la Guardia Nacional, Ley Nacional del Uso de las Fuerzas y Ley Nacional de Registro de Detenciones. El Secretario de Seguridad Pública y gobernadores de las entidades federativas, deberán presentar anualmente un informe sobre el avance de las tareas de seguridad. Ni un solo partido político fue mezquino para pensar y actuar en beneficio de la población. Tampoco hay partidos que quieren que les vaya mal a México para que les vaya bien a ellos. Hoy está en el papel en una sola línea; sí son posibles los acuerdos cuando el beneficiado es México y no un grupo. |
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