En México y en Veracruz falta mucho por hacer para garantizar el acceso a la justica en condiciones de igualdad, en ocasiones son las propias autoridades investigadoras y las encargadas de impartir justicia las que violan el principio de “igualdad” establecido en el artículo 4to de la Constitución y dejan de lado la perspectiva de Derechos Humanos, cláusula establecida en nuestro país “tardíamente” en el 2011.
La recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos 25/2019 fue sorpresiva para muchos e indignante para otros. El caso que analizó la presidenta Namiko Matzumoto es por actos de tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes cometidos en perjuicio de una persona privada de la libertad. Y como autoridades responsables la Fiscalía General del Estado de Veracruz y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Veracruz.
El expediente se refiere a la denuncia interpuesta por Gilberto Aguirre, acusado de desaparición forzada por haber alterado supuestamente el hallazgo de 13 cadáveres, y quien señaló que ha explicado le colocaron radios con música a todo volumen durante al menos siete días, algo que "se convirtió en una tortura".
En este caso, se responsabiliza a servidores públicos de la FGE y de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social de cometer actos tortura “consumados en el interior del CE.RE.SO Zona 1 “ y ocurrieron gracias a la participación conjunta de los mismos.
Las autoridades de la fiscalía habrían alterado los libros de registro al Cereso, donde ocurrieron los supuestos actos de tortura; también desactivaron las cámaras de seguridad ubicadas en el exterior del penal. Los supuestos responsables además de custodios del penal, los fiscales Eduardo Coronel y Marcos Even, pero por “cadena de mando” alcanzaría al actual titular de la FGE y al ex secretario de Seguridad Pública.
El análisis de la recomendación también se advierte que a la FGE de Winckler se le podría caer el caso de Luis Ángel Bravo Contreras (ex fiscal) pues habría sido inculpado “bajo coacción”. Algunos colectivos ya lo habían advertido: montaron la escena, cuando había otras irregularidades reales que perseguir en contra de las ex autoridades del gobierno de Duarte.
La Recomendación es la resolución mediante la cual la Comisión, después de haber concluido las investigaciones del caso, determina que una autoridad o servidor público incurrió en violaciones a Derechos Humanos. Es necesario recalcar que la Constitución en su artículo 102 apartado B, refiere que el control de la constitucionalidad en México también se puede dar por órgano político, en este caso la CEDH.
Con la reforma del 2011, en el que se le da una perspectiva de Derechos Humanos a nuestra Constitución, se hace más latente el Derecho al debido proceso, es decir que el conjunto de requisitos que deben observarse en las instancias procesales a efecto de que las personas estén en condiciones de defender adecuadamente sus derechos ante cualquier tipo de acto del Estado que pueda afectarlos.
Entiendo la indignación de los colectivos. Sus integrantes señalan que no se puede defender a un delincuente. Es cierto, pero no podemos permitir que la tortura y la violencia se combatan con más tortura y violencia.
Cualquier responsable de una fechoría (la que sea) debe ser juzgado y procesado en el marco de la ley, de acuerdo a la Constitución y jurisprudencia internacional, porque sí se violan sus derechos y el debido proceso, entonces hacemos víctimas a los torturadores.
También resulta díficil de creer para muchos que se pueda torturar a una persona con música y más tratándose de reggaeton. Sin embargo, resulta que es una práctica común en regímenes autoritarios.
Organismos internacionales de derechos humanos han denunciado que en la prisión estadounidense de Guantánamo, Cuba, es común la práctica de la tortura a través de la música. Aunque resulte poco creíble, la canción de Barrio Sésamo (una serie infantil Española), el Born in the USA de Bruce Springsteen o We are the champions de Queen y hasta la de Barney (el dinosaurio morado) son usadas a un altísimo volumen durante días o semanas como un instrumento de tortura contra los prisioneros. Y el informe "Medidas Especiales: Detención y Tortura en el Sistema de Shuanggui del Partido Comunista de China" de Human Rights documentó torturas a opositores al régimen por medio de la música. El informe se basó en 21 entrevistas con cuatro ex detenidos y familias de detenidos; 35 relatos de víctimas publicados en 200 informaciones de medios chinos, y 38 veredictos de tribunales de todo el país. Así de victimario se pasa a víctima y nunca conseguiremos justicia para los hombres y mujeres que han desaparecido en la última década en el estado de Veracruz. Hasta los malos tienen derechos humanos, así es esto... |
|
