Jóvenes universitarios nos ponen el ejemplo. En medio del encono y división que ha dejado este año el proceso electoral en México, trabajan de manera ininterrumpida para “construir ciudadanía” en dos zonas violentas del país: en Tizapán, Ciudad de México, y en Coatzacoalcos, Veracruz.
Desde hace cuatro años se propusieron formar comunidad y empezaron con acciones sencillas como conocer a sus vecinos, jornadas de limpieza del barrio que habitaban y el rescate de espacios públicos.
Su tiempo también lo pusieron a disposición de los más pequeños, primero con un curso de verano y después con un club permanente de tareas, clases de música, computación, así como con talleres y actividades deportivas.
El resultado de este proyecto que integran ya 135 estudiantes y maestros en la Ciudad de México es sorprendente. En Tizapán, una colonia de la delegación Álvaro Obregón asolada por la delincuencia y narcomenudeo, se redujo la incidencia delictiva, sobre todo de casos violentos en los que participaban jóvenes.
Encabezados por un veracruzano, Luciano Rodríguez, ITAM Construye se consolidó. Y el reto no fue fácil porque se encontró con muchas puertas cerradas y la desconfianza de las familias. Imagínense que tocan a su puerta dos o tres jóvenes y le dicen que van a pintar su barda. ¿Qué pensaría? Que algo quieren, verdad.
También ha sido difícil el reclutamiento. ¿A poco regalaría su tiempo? Si siempre decimos que estamos ocupados. Pero el gran reto para mi es motivar a universitarios. Aún recuerdo a un grupo de cuarto semestre de licenciatura confesar casi a coro que en su generación no hacían nada si no recibían algo a cambio.
Por fortuna, al siguiente semestre otro grupo de estudiantes se entusiasmó con la posibilidad de ayudar y convivir con niñas de una casa hogar en Xalapa. Y quieren repetir la experiencia. Se sembró la semilla, esperemos que pronto germine y de frutos.
Desde hace seis meses, Luciano inició Coatza Construye, donde replica el éxito de la organización formada en Tizapán, Ciudad de México, en busca de un ideal, transformar la realidad de los vecinos del sur de Veracruz. Hasta ahora van 15 voluntarios en el sur de la entidad, pero confían en crear “voluntariado” para “revitalizar la relación existente entre los miembros de la comunidad y los habitantes en su entorno”.
Sin duda más iniciativas como estas son necesarias cuando vivimos una crisis de violencia en Veracruz y en México. Las tasas de homicidio doloso, robo con violencia, narcomenudeo y violaciones sexuales han aumentado. Los jóvenes son victimarios pero también las víctimas de un problema estructural, arraigado y lacerante. Así que su participación y liderazgo para mejorar el entorno, formar ciudadanía y alcanzar la paz social será esencial.
Acertijo
Tres hermanos viven en una casa:
Son de veras diferentes;
si quieres distinguirlos,
los tres se parecen.
El primero no está: ha de venir.
El segundo no está: ya se fue.
Sólo está el tercero, menor de todos;
sin él, no existirían los otros.
Aun así, el tercero sólo existe
porque en el segundo se convierte el primero.
Si quieres mirarlo
no ves más que otro de sus hermanos.
Dime pues: ¿los tres son uno?,
¿o sólo dos?, ¿o ninguno?
Si sabes cómo se llaman
reconocerás tres soberanos.
Juntos reinarán en un país que ellos son.
En eso son iguales.
Momo
Michael Ende
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