Fue un fin de semana movido, de pasión en la política. Por un lado, Héctor Yunes Landa convocó a lidiar con valor a mujeres guerreras, muy experimentadas en la política. De diferentes partidos y colores, desde la alcaldesa de la Álvaro Obregón, Lía Limón, la Sauri Riancho y la alcaldesa Paty Lobeira de Yunes, su sobrina política. Buen acto en Veracruz en el teatro Clavijero, allí llegó su cuate, Dante Delgado Rannauro, que le acaba de ir a empujar a la SCJN una querella contra el Plan B de AMLO, allí mismo comentó, según Notiver, que la disputa de la Torre que Amlo y Cuitláhuac quieren mochar, él en años la verá como pequeña, porque llegaran torres más altas, que desvíen más los nortes, hasta que en esa parte del malecón se vea la estatua de Venustiano Carranza muy chaparrita, una especie de Manhattan con sus grandes rascacielos. Bueno, pues. Buen acto de Yunes Landa, quien quiere el cetro de la candidatura. Por otro lado, otro Yunes, Miguel Ángel Yunes Linares, se ve bien movido con un facebbookazo donde, en Coral Gables, Florida, llegó en segundo lugar en un maratón de 5 kilómetros, demostrando su gran fortaleza y condición física, porque a sus 70 años llegar en segundo lugar a la meta es una osadía (Yo Mero no corro ni una cuadra, cuando ya tiró el mofle). El otro movido lo fueron los dos Checos, uno en la Fórmula Uno, donde alcanzó segundo lugar y pódium y el otro el de Morena, Cheko Gutiérrez Luna, que formó su campamento médico, su dream team de salud, entre ellos con algunos expriístas, pero dice que entre él y López van por todo, para muina de Palacio jalapeño. Pepe Yunes activo también por Veracruz, tuitea sus caminares y allí anda, en busca de la corona. Las encuestas de Mitofsky de fin de semana, ubicaron a dos alcaldes, el de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuil, y el de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, como punteros para ser candidatos de sus partidos, o sea, sería un tirito entre alcalde y empresarios, ambos. Circularon también fotografías de Cuitláhuac García, el gobernador que andaba en una bicua y de Patrocinio, su secretario, éste en moto, pero les abollaron la corona ese nefasto día, cuando le mataron a un colaborador de él, un crimen imperdonable y terrible porque mataron al exdiputado, director de servicios legislativos en el Congreso local, a su hijo menor de 7 años y su esposa. En este Veracruz de tragedias, de crímenes y Abrazos y Balazos. Del que no se supo nada, fue del tal Julen Rementería, panista y senador.
EL CALAMBRE CONGRESISTA
Andan los americanos congresistas, desde endenantes, diría Minga, una gente de mi pueblo, amenazando a los carteles mexicanos y por ahí a su gobierno, con fijar una ley que permita a los Marines y al invencible Ejército de Estados Unidos, que ha ganado dos Guerras Mundiales, a entrar a cualquier territorio donde los carteles sean calificados como terroristas. Si usted vio el documental donde Televisa escribió sobre el Fentanilo y dos de sus reporteros ganaron el Premio Rey de España, con “Fentanilo: futuro para el narco, muerte para la humanidad”, entenderá enseguida y le dará temor el ver cómo preparan esa droga que mata a cien mil estadounidenses al año, porque no la preparan como el químico de la película Breaking Bad, la preparan al ‘ahí se va’ y cómo caiga le echan los químicos y, cuando un gringo toma su pastilla, a los pocos minutos muere. Eso tiene espantados a los americanos y con justa razón. Hay una buena cantidad de mexicanos, que agradecerían vinieran a apaciguar a estos carteles -aunque los llamen traidores a la patria-, que traen asolados a pueblos y comunidades, porque la política de abrazos y no balazos solo funcionó para bien de ellos. Por eso el Congreso de Estados Unidos emitió resolución autorizando al presidente Biden a usar sus fuerzas armadas en territorio mexicano contra los carteles. Ay nanita. Inmediatamente, el apagafuegos Monreal se quejó: “Como líder de la mayoría del senado mexicano, expreso mi rechazo y preocupación ante la iniciativa presentada en enero de este año en el Congreso estadounidense por el legislador texano, Dan Crenshaw, la cual espero que sea desechada”.
Ahí está, la beben o la derraman, si no pueden combatir a estos carteles que traen loco a medio país, aquellos vendrán y vaya que sí podrán, aunque aquí los mariachis lloren. Qué sea por el bien de México y de la humanidad y de la lucha contra las drogas, que tanta gente muere. Más ahora que el embajador Ken Salazar ofreció 50 mil dólares de recompensa por unos ciudadanos americanos secuestrados en Mata-moros, Tamaulipas. No le rasquen la panza al tigre, ni le jalen la cola.
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