El único mérito de José de Jesús Mancha Alarcón para buscar la reelección al frente de la dirigencia estatal del PAN, ha sido el de ser un buen peón al servicio de los Yunes, no es inteligencia, no es destreza, no es capacidad organizativa, no es operatividad, es simple y llanamente su habilidad para venderse como un jornalero dispuesto a cumplir a pie juntillas los designios de sus jefes a costa de haber abandonado los principios y valores de Acción Nacional, traicionando al mismo tiempo a la clase política que históricamente se enfrentó a la soberbia y prepotencia del PRI.
El endeble argumento de Mancha Alarcón para intentar imponerse como presidente del CDE del PAN es simple: Busco el apoyo de la militancia porque gracias a mí, el partido logró un millón 400 mil votos en el último proceso electoral, cifra histórica, jamás imaginada.
¿Y eso qué? Responderían los panistas, agraviados en su dignidad, al haber sido ninguneados en este mini gobierno, durante el cual un reducido grupo de gambusinos y cuatreros aprovecharon el momento para colocar a sus amigos y cómplices en los espacios de poder político y económico, olvidando que son lo que son, gracias a las bases.
Y precisamente ese militante de a pie es el que ahora está dispuesto a cobrar viejas deudas al diminuto ex diputado local. De ahí que su contrincante Joaquín Guzmán Avilés, aumente cada día su abanico de posibilidades para arribar a la dirigencia estatal, asumiendo compromisos con el panismo de carne y hueso de todos los rincones de Veracruz.
Se cuestionan lo mismo en el norte, en el centro que en sur de la entidad los panistas de viejo cuño ¿De qué sirvió ese millón 400 mil votos con los que hoy pretende vestirse de gloria José Mancha, si perdieron vergonzosamente la gubernatura, el Congreso Local, las dos senadurías y las diputaciones federales?
Me cuenta Carlos Romanillos, veterano militante panista en Minatitlán: Si Pepe (Mancha) hubiera tenido un gramo de vergüenza habría renunciado a las 72 horas de la masacre electoral que sufrimos, pero por lo visto no la conoce. Ahora ha recurrido buscando le apoyemos el próximo 11 de noviembre. Ya le dije que sí, que cuenta con mi voto…pero en contra. Que cabrón.
En ello coinciden José Luis Sosa, un activista albiazul y Miguel Ángel Brito, al condenar la falta de escrúpulos de Mancha Alarcón, acusado en plena campaña de haberse “hinchado” de billetes, por interpósitas personas, a través de lo más repudiable en el seno de Acción Nacional: traficar influencias en la SIOP y en el Congreso del Estado, para beneficio personal. Esto constituyó un agravio muy serio al decoro del panismo veracruzano y el 11 de noviembre nos veremos en las urnas.
Y si Mancha Alarcón suponía que sería profeta en su tierra, Tuxpan, se equivocó olímpicamente porque desde aquél puerto me hacen saber que el panismo se encuentra más que deseoso por participar en el proceso interno y cuentan los días para cobrarle en las urnas antiguas afrentas a quién en un proceso amañado, impuso por sus tenates a su primo como alcalde.
En contraparte y en medio de la efervescencia albiazul, Joaquín Guzmán Avilés ha demostrado mayor solidez en su campaña al sumar a casi todos los liderazgos tradicionales de Acción Nacional, entre ellos a los diputados locales Enrique Cambranis (electo), Tito Delfín Cano, Germán Yescas, Víctor Serralde, Francisco Gutiérrez de Velasco, Federico Salomón, Amado Nivón, Efraín Martínez, Cruz, Víctor Hernández Félix, Rafael Sánchez, Miguel Bahena Viveros, Mariana Dunyaska, entre otros no menos importantes.
Guzmán Avilés cuenta en Tantoyuca con un padrón de cuatro mil 50 socios activos. Analistas al interior del PAN consideran que de los 23 mil 500 militantes registrados en todo el estado, el próximo 11 de noviembre podrían acudir a elegir a su dirigente estatal unos 18 mil panistas.
De hecho el día de su registro presentó el ex diputado, 13 mil 700 firmas de apoyo ante Notario Público. Así que saque usted sus conclusiones.
Otro factor a favor: La naturaleza del panista auténtico ha sido siempre la de ir en contra de la “línea”. Les “purga” que desde el poder les impongan y cuando eso ha ocurrido, simplemente se abstienen de participar y ocurren desgracias electorales como la del pasado 01 de julio.
Una encuesta reciente ordenada por el CEN blanquiazul ubica a JGA con el 65 por ciento de la preferencia, José Mancha cuenta con un 27 por ciento, en tanto el resto se muestra indeciso. Así las cosas. |
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