Bien dicen que, que de la calle ha de venir, quien de tu casa te ha de sacar. Desde la conquista, a excepción de célebre Benito Juárez García y uno que otro también digno del pueblo, Lázaro Cárdenas, el expropiador del petróleo en México, cuyo costo fue de todos los mexicanos, pues hubo personas que hasta gallinas llevaron para pagar la deuda a los dichosos extranjeros, dueños del oro negro; y ahora resulta que un tal EPN, con la mano en la cintura, lo vende.
Y no conforme con esto, también expropia el agua, la tierra flora y fauna y por si eso no bastara, los yacimientos de oro, plata, cobre y todo lo que México posee de riqueza natural. Y por si fuera poco, ahora con la ley educativa, nos van a programar a que no procree el pueblo, con la intromisión de a través de caricaturas, las uniones de personas del mismo sexo. Estos modus operandi, lo hemos visto con nuestros nietos, conocidos y en la red social facebook.
En ese tenor, están hombres con hombre y mujer con la finalidad de ir preparando a la niñez y juventud en esta acción digna de aberración, pues todo lo no natural es perjudicial al ser humano, que no sabe ni para donde mirar. Y menos un niño que apenas está conociendo el mundo y le presentamos imagines, en cuyos hogares ve con sus padres hombre y mujer y luego le dicen que esa caricatura es normal, pues como explicarles estos hechos a los infantes de mente blanca y sana.
Así que este 18 de marzo, ¿qué vamos a celebrar? Si ya todo está vendido. ¿Hasta cuando veremos la nuestra? ¿Con otra revolución, con otro gobierno o con qué?
Bueno por lo menos, vamos a festejar el día 21 de marzo, que gracias a Dios, eso no deja divisas, sino también lo expropiarían. ¿Hasta donde llega la necesidad de dinero de los poderosos, que con eso se gastan y degastan –quizá pensando que van a ser eternos. Pero solo congelados y hasta dentro de mil años, como un ser humano que acaban de despertar después de años de congelación.
Y por otro lado, -aunque la primavera, pronto dizque a llegar- será este próximo 21 de marzo, nada tiene que ver con la primavera de hace años, cuando a la vez, también había cabañuelas, en el mes de enero, ahora con el cambio climático, nada tiene que ver con esos tiempos, vividos en nuestra infancia, en tiempo y forma. Ahora sales con frio y regresas con calor, agua o frio.
Pero en fin, por lo menos los educandos, maestros y burocracia se dieron un lapsos de tres días de asueto, lo que lo disfrutaron muy bien, aunque los maestros que trabajan hasta en su hogar, tuvieron que calificar, trabajos de sus alumnos, lo que tenemos comprobado con maestros de tiempo completo, pago a medias y mal pagados, algunos. |
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