Ajeno a la verdad el presidente López Obrador, sin ninguna necesidad, se pone a defender el supuesto triunfo de Nicolás Maduro en las elecciones de Venezuela. No tiene necesidad, porque Venezuela, en su precariedad, no es un socio comercial de México. Quizá el único afán de López Obrador sea llevar la contraria a la derecha latinoamericana, o fastidiar a sus críticos que siguen pregonando su incongruencia. Para López Obrador no hay ninguna prueba del fraude de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales de Venezuela. No debería extrañarnos. López Obrador siempre negó que él hubiera intervenido en la elección presidencial de México; siempre negó que se hubieran usado os programas sociales como carnada para acarrear votantes a favor de sus candidatos; siempre negó que Morena hubiera cometido actos ilegales durante la contienda electoral; López Obrador siempre ha negado que el crimen organizado operara a favor de sus candidatos. Por lo mismo, no debería extrañar que, ante tanta evidencia documentada en video, niegue que Maduro haya cometido fraude electoral. A unos meses de dejar la presidencia a López Obrador ya no le importa el ridículo, ya no le importa la verdad.
Se le acaba el tiempo a Nicolás Maduro. Estados Unidos reconoce el triunfo de Edmundo González en elecciones presidenciales de Venezuela
Sólo Petro, Lula da Silva y López Obrador respaldan a Nicolás Maduro. El resto de los países de América exigen a Nicolás Maduro que muestre las actas que respaldan su triunfo; actas que debieron mostrarse de inmediato. Pero Maduro no tiene esas actas, lo que necesita es tiempo para fabricarlas. La oposición por su parte sí ha mostrado las actas que demuestran que Edmundo González ganó las elecciones en Venezuela por millones de votos; las ha mostrado y las ha subido a internet, para que cualquiera las pueda cotejar. Es por ello que Brian Nichols, jefe de la diplomacia estadounidense para el Hemisferio Occidental, reconoció el triunfo de la oposición: "La tabulación de esos resultados detallados muestra claramente una verdad irrefutable: Edmundo González Urrutia ganó con el 67 por ciento de esos votos frente al 30 por ciento de Maduro. Y sencillamente, no hay suficientes votos en las actas de recuento restantes para superar tal déficit". A Maduro se le acaba el tiempo, se le acaban los apoyos y lo único que le queda, como perro acorralado, es ladrar, amenazar que lo que sigue es una guerra civil. Y a ese tirano López Obrador sigue apoyando.
El país pertenece al narco, y si no lo creen pregunten a los empresarios de Nuevo Laredo. Cierran tiendas Oxxo y gasolineras por cobro de piso
Donald Trump se lo escupió al gobierno de López Obrador: “Los cárteles son quienes administran México, pueden quitar al presidente en dos minutos”. Ciudadanos de varios estados de la república pueden dar fe de que lo que dijo Trump es cierto. Tan sólo en Nuevo Laredo, Tamaulipas 150 tiendas Oxxo y gasolineras han decidido cerrar por la inseguridad que se vive en esa ciudad, por el cobro de piso. FEMSA, la empresa que administra las tiendas Oxxo lanzó un comunicado en el señala que la decisión de cerrar los Oxxos se debe a “actos de violencia que pusieron en riesgo la integridad de los colaboradores”. Esos actos de violencia se han dado por el cobro de piso. Otras tiendas como Soriana, Aurrera, Walmart y Chedraui han decidido cerrar sus establecimientos más temprano debido a la violencia que se vive en la ciudad. Vale mencionar que el gobernador de Tamaulipas es el morenista Américo Villarreal, un sujeto que operó en las elecciones estatales de Sonora y Sinaloa como contacto de los grupos criminales. Américo Villarreal fue uno de los hombres cercanos al Rey del Huachicol, Sergio Carmona Angulo. Villarreal, junto con el líder de Moran, Mario Delgado, viajaban con frecuencia en la aeronave del Rey del Huachicol. No extraña que el narco actué a sus anchas en un estado que entregaron a Morena, con un gobernador al que pusieron en el trono.
Armando Ortiz Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra
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