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Foto:
Cortesia.
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Xalapa, Ver.-
Carlos Alfredo "N" alias ´El Figurita´ recibió una condena de cuatro años y siete meses de prisión, por el secuestro y asesinato del docente Diego Yasmar Barrales San Juan, ocurrido en Álamo Temapache. El pasado 30 de enero de 2025, un juez especializado dictó sentencia condenatoria contra Carlos Alfredo "N", quien fue hallado responsable del delito de secuestro agravado con el fin de obtener rescate en agravio de Diego Yasmar Barrales San Juan, asesinado en agosto de 2024. "El adolescente fue sentenciado a cuatro años y siete meses de internamiento, conforme al proceso JJ/33/2024-II correlativo JRJ/074/2024-II, luego de comprobarse su participación directa en la planeación, ejecución y muerte de su maestro". Carlos Alfredo "N" fue detenido en septiembre de 2024, un mes después del homicidio, cuando aún era menor de edad. Por lo anterior, fue internado en el Centro de Internamiento para Adolescentes (CEIPA), ubicado en Palma Sola, en Alto Lucero, pues la ley impidió que recibiera una condena de adulto. De acuerdo con la carpeta de investigación, el 6 de agosto de 2024 se reportó la desaparición de Barrales San Juan. Había salido en una camioneta Dodge Durango blanca, placas YTP-978-B, para hacer compras en la zona centro de Álamo, pero no regresó a su domicilio. Ese mismo día, cámaras de seguridad captaron a Carlos Alfredo "N" abordando al profesor en un punto cercano al Palacio Municipal. ´El Figurita´, como lo conocían por su complexión física, aprovechó su cercanía con el maestro para convencerlo de subir a su vehículo. Ya en control, lo llevó a una zona apartada donde lo ató, golpeó, le rompió los tobillos y le colocó cinta en la boca, a la espera de su cómplice", refiere el expediente judicial. El joven fue acompañado por Juan Diego "N", estudiante de la Universidad Veracruzana, con quien grabó imágenes del maestro sometido. Esas pruebas fueron utilizadas para exigir dos millones de pesos a la familia de la víctima, con amenazas de muerte si no se realizaba el pago en un campo deportivo. No obstante, la víctima fue asesinada horas después del secuestro. A pesar de que ya se encontraba sin vida, los agresores continuaron enviando videos a los familiares. "Los homicidas compraron un día antes sogas, cinta y otras herramientas, según se comprobó mediante cámaras de videovigilancia", se explicó. Según la reconstrucción de los hechos, el maestro fue torturado, apuñalado y posteriormente ejecutado de un disparo. Los agresores circularon con el cuerpo en su camioneta por la ciudad de Álamo y finalmente lo abandonaron en el río Pantepec, en una zona conocida por la presencia de cocodrilos. "La camioneta del docente fue localizada al día siguiente, el 7 de agosto, en un camino vecinal del ejido Pueblo Nuevo. El cuerpo fue hallado hasta el 9 de agosto, atorado entre ramas, maniatado y con signos de violencia, en un área de difícil acceso", se informó oficialmente. Durante el funeral del maestro exalumnos, docentes y miembros de su comunidad religiosa acudieron a darle el último adiós. Mientras tanto, los agresores continuaban enviando amenazas a los familiares del docente, quienes decidieron abandonar la ciudad ante el temor por su integridad. Carlos Alfredo "N" fue detenido el 8 de septiembre en Álamo y su cómplice en el municipio de Tuxpan. En sus teléfonos se hallaron fotografías, videos y mensajes donde describían los detalles del crimen. "En los mensajes se burlaban, incluso describían cómo pudieron ver los huesos de la víctima al apuñalarlo", revelaron peritos forenses….LA MAÑANA de este lunes, una llamada anónima encendió las alertas pues supuestamente una persona había sido privada de la libertad de un domicilio ubicado en la calle Sevilla, en el fraccionamiento Las Ánimas, en Xalapa. La versión indicaba que se trataba de un posible secuestro en curso, lo cual puso en marcha a los cuerpos de seguridad. Luego del reporte, unidades de la Policía Municipal y Seguridad Pública arribaron al lugar causando revuelo entre los vecinos. Las patrullas se estacionaron frente a un inmueble que resultó ser un despacho de oficinas. Tras una entrevista con quienes ahí laboraban, los uniformados determinaron que no había ninguna señal de delito, pues nadie estaba retenido contra su voluntad ni se había presentado una situación irregular. Los empleados explicaron que no tenían conocimiento de ningún incidente y que todo transcurría con normalidad. Una vez descartada la emergencia los elementos de seguridad se retiraron del lugar. No se reveló información sobre el origen de la llamada, aunque se confirmó que fue realizada de manera anónima. Por último, las autoridades no descartaron que se tratara de una broma o un malentendido.
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