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XALAPA.- Las deportaciones masivas de migrantes ilegales que anunció el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump no son viables para efectos legales, pero México si debe alistarse para una política de contención que pondrá en marcha el gobierno estadounidense que incluirá acuerdos para impedir el paso de migrantes, borrar ciudades santuarios y obstaculizar la estadía de “dreamers” en su territorio, así lo consideró la IBERO. A través del director de la Clínica Jurídica Alaíde Foppa, Salvador Guerrero Navarro, detalla que las tres principales medidas de contención serán: acuerdos con otros países como México, Guatemala o El Salvador, para impedir que migrantes lleguen a EU; tratar de borrar las ciudades santuario, hacer difícil la estadía de personas, con políticas complicadas para los dreamers y para aquellas y aquellos que quieran regularizarse, así como deportaciones. Al asegurar que para efectos legales, una deportación masiva no es viable y más bien se trata más de propaganda de Trump, dijo que el próximo presidente no le habla a México ni a Latinoamérica, sino más bien a Estados Unidos y a sus votantes por lo cual se esperan políticas de contención, lo cual no es exclusivo de los republicanos, sino que han sido aplicadas, de igual manera, por demócratas como fue el caso de Barack Obama o más recientemente Joe Biden. El experto en Derechos Humanos descartó que haya muchas sorpresas o cambios en la segunda gestión de Donald Trump, quien se destacó por su dureza en temas migratorios en su primer periodo. Guerrero Navarro condenó que se utilice la migración como una moneda de cambio, cuando en realidad “no tiene que ser una negociación política, sino que se tendría que atender el fenómeno de manera multilateral, así como se hace con el cambio climático, el terrorismo internacional o la ciberdelincuencia”. Hace unos días, la presidenta Sheinbaum anunció el reforzamiento de la red consular de México en Estados Unidos para apoyar a los connacionales en caso de que Trump consume su amenaza de poner en marcha una deportación masiva de migrantes ilegales. Sin embargo, Guerrero Navarro desestimó esos amagos de Trump e incluso la estrategia de Sheinbaum para hacerle frente a esa amenaza.
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