Era septiembre de 2015, cuando una foto impactó al mundo: era el pequeño Aylan muerto a la orilla de una playa de Turquía, su cuerpo yacía boca abajo, pues él al igual que su familia huían de Siria buscando refugio en otro país. Ahora, es la pequeña Valeria, dentro de la playera de de su padre, quien nos deja en shock. Ellos yacen flotando boca abajo, entre juncos a orillas del río Bravo.
Su nombre era Óscar, de 25 años y su hija Valeria, de apenas un año once meses, ambos salvadoreños con visa humanitaria del gobierno mexicano. Murieron ahogados cuando el joven padre trató de cruzar el Río Bravo con su hija en la espalda, sin embargo no pudo llegar a la orilla… así lo narra su esposa, quien solamente los vio desaparecer. Ellos iban a solicitar asilo político en Estados Unidos; sin embargo, al encontrar cerrada la oficina migratoria por ser domingo, y al explicarles que tendrían que esperar turno por la larga lista de espera, se desesperaron y decidieron cruzar ese mismo día el río por el lado de Matamoros, Tamaulipas.
Ése mismo domingo murieron deshidratados al sur de Texas, tres niños y una mujer. Eran migrantes guatemaltecos que habían logrado cruzar la frontera estadounidense; sin embargo, se perdieron en el desierto según narran dos mujeres que iban con ellos y que sobrevivieron a las altas temperaturas y la deshidratación. Ellas fueron llevadas al hospital y serán repatriadas a su país de origen.
Estos sucesos son el resultado del recrudecimiento de la Política Migratoria de Donald Trump, quien condicionó a nuestro país con altos aranceles sino contenía a los migrantes en su frontera. Ése fue el acuerdo migratorio con México que contempla la contención de los migrantes y la aplicación del programa Quédate en México que consiste en que los solicitantes de asilo permanezcan en nuestro país hasta que EU les resuelva su situación migratoria, aunque a Trump no le apura mucho ya que incluso declaró que muchos de los que buscan asilo político en su país argumentan puras “fivolidades”, por lo que está dispuesto a restringir las concesiones de asilo.
Después de ver la foto de Oscar y Valeria abrazados eternamente, la expresión de Trump fue ¡La odio! Y de inmediato culpó a los demócratas por no aprobar esa legislación que trae en mente que consiste en un plan para garantizar la seguridad en la frontera y detener la inmigración ilegal. Aunque afirma sí aceptaría inmigrantes, pero por sus cualidades y méritos, es decir que estén muy bien calificados, ya no se tomará en cuenta si llegaron de manera ilegal desde pequeños o si tienen muchos años en el país. Además será necesario que sepan hablar perfectamente inglés, su preparación y hasta su edad.
Desde luego que estas declaraciones de Trump que nos espantan a todos le funcionaron muy bien durante su campaña para llegar a la Presidencia, por eso ahora quiere volver a utilizarlas.
Así que es seguro que sigamos viendo en nuestro país una gran cantidad de migrantes tratando de cruzar nuestro país mientras la Guardia Nacional los detiene como ha sucedido recientemente en Veracruz.
¿Dejar pasar a los migrantes y que Estados Unidos nos incrementen los aranceles o detenerlos y regresarlos a su país? Sin duda el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene un gran conflicto, ya que él había dado libre tránsito por el país en pro de los derechos humanos internacionales, pero Trump lo paró en seco. Y créame que Trump hubiera hecho lo mismo con cualquier presidente no importando su partido ni condición.
Sin duda estamos en la ante sala de una crisis humanitaria.
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