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XALAPA.- Autoridades estadounidenses han detenido a miles de inmigrantes sin documentos y deportado a centenares en la operación contra la inmigración irregular lanzada por el presidente Donald Trump; algunos indocumentados se sintieron a salvo por pagar impuestos y contribuir a la riqueza del país, sin embargo, también están en riesgo. El abogado, que defiende los intereses del gobierno estadounidense ante una corte federal, confirmó que está buscando información confidencial del Servicio de Recaudación Interna (IRS) sobre inmigrantes contribuyentes, con el fin de deportar a los que no tengan papeles. “Hay conversaciones en curso… sobre el intercambio de información” entre el IRS y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), explicó el abogado del Departamento de Justicia, Andrew Weisberg, en un tribunal federal de Washington, de acuerdo a información citada por CNN. La audiencia escuchaba los argumentos ante la demanda entablada por dos organizaciones que buscan que el tribunal federal prohíba al IRS compartir información confidencial sobre los inmigrantes. En concreto, el Immigrant Solidarity DuPage (ISD) y el Centro de Trabajadores Unidos (CTU) presentaron el pasado 7 de marzo la demanda que busca impedir que el IRS comparta la información de los contribuyentes que presentan sus declaraciones usando un número de ITIN, otorgado generalmente a indocumentados. La querella legal se dio después de que el DHS solicitó al IRS entregar las direcciones de aproximadamente 700 mil indocumentados identificados para su deportación, lo que los demandantes consideran violaría las protecciones individuales de los contribuyentes. Kevin Herrera, director legal de Raise the Floor Alliance que representa a los demandantes, informó en un comunicado que han pedido garantías al Gobierno Trump de que detendrán su intento de presionar al IRS por la información personal de indocumentados mientras el caso se desarrolla en los tribunales. Sin embargo, la jueza de distrito Dabney Friedrich se negó este miércoles a emitir una orden de emergencia que impida al IRS compartir estos datos, argumentando que los grupos que demandaron al Ejecutivo estadounidense no presentaron pruebas suficientes de que se compartiera la información de inmediato, según reportó CNN.
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