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Xalapa, Ver.- El Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (PT) se enfrentó a legisladores de Morena durante la sesión solemne por la presencia de Rachid Talbi El Alami, presidente de la Cámara de Representantes del Reino de Marruecos, a quien abuchearon e incluso acusaron de un posible soborno del gobierno de ese país a legisladores de la 4T. La insistencia de Morena para realizar la sesión solemne fue tal, que la diputada Margarita García resaltó que, en contraste, a finales de enero se negó el ingreso a la embajadora de Palestina, Nadya R.H. Rasheed. Y soltó: “¿Y por qué no se le permitió la entrada? ¿Será porque no les ha invitado a borracheras? ¿Será porque no les invitó viajes? Por favor, compañeros y compañeras de la 4T, no seamos incongruentes. ¡Lo que no tiene lógica suena metálico!” El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, intentó calmar los ánimos, pero la postura del PT escaló el conflicto que mantiene con Morena por la falta de acuerdos en las candidaturas en las elecciones de Veracruz, la ruptura del pacto en Michoacán y la imposición de la política de las relaciones con otros países desde Morena, por encima de la Comisión de Relaciones Exteriores, que preside Pedro Vázquez. Los diputados petistas no solo desplegaron una manta en la que se leía “Sahara Occidental libre”, también desde la tribuna la oaxaqueña Margarita García llamó “genocidas” a Talbi el Alami y al embajador de Marruecos en México, Abdelfattah Lebbar, también presente en el salón, por la invasión al pueblo saharaui. Desde el arranque de la sesión, la bancada del PT desplegó la manta al pie de la tribuna, lo que retrasó la intervención del representante marroquí. Entre los gritos que surgían desde las filas del PAN y el PRI y los reclamos del PT, Gutiérrez Luna exclamó: “¡Orden, orden! ¡Aquí no es un concurso de porras ni un concurso de a ver quién tiene la razón o no! ¡Les pido, por favor, permitan al orador dar su discurso!”. Ante el tono que asumió el morenista, y mientras sostenía la manta con sus compañeros, Margarita García le exigió: “¡No nos grite!”. Sin bajar la voz, Gutiérrez Luna le devolvió: “¡No le estoy gritando a usted, diputada! Estoy hablando con mucho respeto a todos”. Después de ese discurso, la primera en intervenir fue Marcela Guerra (PRI), quien viajó a Marruecos en noviembre del año pasado, y quien recordó el estatus de las relaciones diplomáticas entre México y ese país. Dijo a los invitados: “México es su casa, vengan cuando quieran. El PRI los saluda y México también”. Rubén Moreira, coordinador del PRI, refirió que desde el lunes de la semana pasada en la Junta de Coordinación Política planteó la inconveniencia de citar a esa sesión solemne, porque Marruecos invadió el Sahara Occidental, hay una guerra, y sobre todo porque Rachid Talbi el Alami “no es un jefe de Estado”. Además, resaltó que el acuerdo parlamentario no pasó por la Comisión de Relaciones Exteriores, y Pedro Vázquez, quien confirmó que le envió una carta al secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, para darle elementos de lo incorrecto de convocar a la sesión solemne, porque se aparta de los principios de la política exterior de México. Después de la intervención de Guerra, Margarita García intervino a nombre del PT, para expresar el rechazo a la presencia de la representación marroquí. Comentó que no se explicaba la sesión solemne, cuando Marruecos “no es nuestro principal socio comercial ni turístico… Solo espero que Marruecos no esté comprando voluntades con esta Cámara para llevar a cabo esta sesión que, no me extraña, por ser una actividad que los caracteriza de hecho, su política diplomática es cuestionada por ofrecer sobornos a legisladores y legisladoras de la 4T. A Rachid Talbi el Alami, le dijo: “usted mencionó que su felicidad es más profunda por dirigirse desde la tribuna. Su felicidad sería más profunda si respetara los derechos del pueblo saharaui y dejaran de ser genocidas, invasores y violadores a los derechos humanos del pueblo saharaui. “Compañeros de Morena, traen a esta tribuna al representante de un reino opresor, son transgresores de derechos humanos, actos que van en contra de todos los principios que caracterizan a la cuarta transformación. “El grupo parlamentario del Partido del Trabajo reiteramos todo nuestro apoyo y compromiso a los hermanos saharuis; rechazamos los actos genocidas y la política de represión que han ejercido contra el pueblo saharaui. Durante más de 50 años no les ha importado ninguna de las 74 resoluciones de la ONU, por lo que les exigimos dejen en paz a nuestros compañeros saharauis, lleven a cabo elecciones libres y democráticas para el respeto del derecho inalienable de la autodeterminación del pueblo saharaui, conforme a la resolución mil 514 de la ONU. ¡Aquí no son bien recibidos! Rechazamos toda la invasión del pueblo genocida de Marruecos”.
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