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XALAPA.- Este lunes 20 de enero Donald Trump regresa a la Presidencia de Estados Unidos, luego de ganar las elecciones presidenciales en noviembre pasado y de que los republicanos retomaran el control del Congreso. Con una nueva gestión del magnate estadounidense, regresan algunas caras y se integran otras más, a fin de tomar medidas más radicales en materia migratoria y económica respecto a su primer gobierno que comenzó en 2017. Desde su campaña, el magnate causó polémica principalmente por dos temas. El primero de ellos es la imposición de aranceles a México y a Canadá, dos de sus principales aliados comerciales. El motivo de los aranceles es una represalia a fin de que ambos países cierren sus fronteras y controlen el flujo de migrantes, así como la entrada de fentanilo. La segunda polémica son las deportaciones masivas que prometió desde campaña, señalando que algunas de las personas que llegan de manera ilegal a Estados Unidos son “criminales”, mismos que afectan la vida de las y los estadounidenses. Trump dijo en el pasado que, desde el día de su investidura, impondrá aranceles generalizados del 25 por ciento a México y Canadá, a la espera de que se cumpla su promesa. Sin embargo, y a falta de lo que realmente pase este lunes, esto es lo que debes saber sobre el gabinete de Donald Trump: John Ratcliffe es uno de los principales funcionarios de Donald Trump que repetirán en el Gobierno que inicia este 20 de enero. En la pasada gestión fue director nacional de Inteligencia, y ahora será director de la CIA, siendo uno de los más críticos hacia China de la futura administración. Tom Homan, zar de la frontera, es otro de los que regresan al Gobierno de Trump. En 2017 estuvo al frente de la agencia de Migración, y ahora será el principal funcionario encargado de la crisis migrante que vive Estados Unidos, bajo la promesa de deportaciones masivas, así como ‘atacar’ a las ciudades ‘santuario’ que protegen a migrantes. Linda McMahon, una de las mujeres que encabezan la WWE, también vuelve de la anterior gestión de Trump, ya que en el pasado estuvo en la Administración de Pequeñas Empresas, y para esta administración será secretaria de Educación. Stephen Miller es otro de los que vuelve, y luego de haber sido uno de los principales asesores de Trump en su primer mandato, redactarle discursos y ser uno de los artífices de algunas de sus políticas antimigrantes más fuertes, se posicionará como subdirector de Política. Los integrantes que entrarán al Gobierno de Donald Trump son: Marco Rubio, secretario de Estado. Elon Musk, director de Eficiencia Gubernamental. Pam Bondi, fiscala general. Susie Wiles, jefa de gabinete. Scott Bessent, secretario del Tesoro. Tulsi Gabbard, directora de Inteligencia Nacional. Elise Stefanik, embajadora ante la ONU. Pete Hegseth, jefe del Pentágono. Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional. Robert Kennedy Jr., secretario de Salud. Chris Wright, secretario de Energía. Sean Duffy, secretario de Transporte. Howard Lutnick, secretario de Comercio. Marco Rubio será secretario de Estado. Uno de los más fieles es su nominado a secretario de Estado, Marco Rubio. El senador de origen cubano está considerado un “halcón” en política exterior con posiciones a favor de mano dura con China e Irán y de las sanciones sobre Cuba y Venezuela. Fue uno de los rivales de Trump en las primarias de 2016, pero se convirtió en uno de sus asesores más cercanos, especialmente en política hacia Latinoamérica. El petrolero Chris Wright, uno de los megadonantes del Partido Republicano, ha sido elegido para dirigir el Departamento de Energía. Wright ha dudado de la existencia de la crisis climática y defiende los combustibles fósiles. En el gabinete también se espera al ideólogo de la estrategia migratoria de Trump: Stephen Miller, nominado como subdirector de política de la Casa Blanca. Se dice de él que es el arquitecto de las deportaciones masivas que ha prometido emprender y de las políticas de separación de familias migrantes. Susie Wiles, que hará historia como la primera mujer en ejercer de jefa de gabinete, seguirá a su lado después de dirigir su campaña en 2016 y su estrategia en los pasados comicios. Los más polémicos dentro del equipo de Donald Trump. Uno de los nominados más controvertidos es Pete Hegseth, comentarista de la cadena conservadora Fox News y elegido para ser secretario de Defensa. Se ha visto envuelto en una polémica por un caso de abuso sexual y por su supuesto abuso del alcohol. La gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, nominada a secretaria de Seguridad Nacional, sonó como posible vicepresidenta de Trump, pero sus opciones se evaporaron tras confesar que había matado a tiros a un cachorro por considerarlo “imposible de adiestrar”. La elegida para directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, fue durante una década militante del Partido Demócrata, pero aunque llegó a presentarse a las primarias acabó abandonándolo y se fue acercando a la órbita de Trump. Ha estado señalada por su supuesto apoyo al ahora derrocado mandatario sirio Bashar al Assad. Si bien su nombre no es tan polémico, Pam Bondi, elegida para fiscal general, será recordada por sustituir a Matt Gaetz, que acabó retirando su candidatura entre acusaciones de consumo de drogas y relaciones sexuales con menores. En el gabinete de Donald Trump habrá nombres especialmente rupturistas, como su nominado como director del FBI, Kash Patel. Ha sido muy duro con el funcionamiento de esa agencia federal y defiende cerrar la oficina central en Washington, descabezar su dirección y desmantelar su burocracia. Aunque puede que ella no sea tan crítica, Trump ha confiado a la exejecutiva de lucha libre Linda McMahon, que dirigirá la Secretaria de Educación, una de las tareas más radicales: desarticular ese departamento, que según Trump está infiltrado por “radicales, fanáticos y marxistas”. Un nombre crítico con algunas decisiones tomadas por el Departamento de Salud en la reciente legisladora demócrata ha sido el encargado de Trump para dirigirlo. A Robert F. Kennedy Jr., sobrino del expresidente asesinado en los años 60, John Fitzgerald Kennedy, se le conoce por sus teorías de la conspiración sobre las vacunas. Durante la pandemia de la COVID-19 decía que el virus tenía como objetivo atacar a los caucásicos y a los negros. En ese sentido, el gabinete de Trump es clave para que cumpla sus objetivos, ya que algunos de ellos, los más radicales, han planteado ideas como las deportaciones masivas o incluso no otorgar la ciudadanía a todas las personas que nazcan en Estados Unidos.
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