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XALAPA.- Según José Antonio Peña Merino, titular de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones, un día antes de que fuera publicado el decreto de la reforma constitucional en materia de simplificación orgánica, que formaliza la desaparición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), este organismo licitó todo lo que queda del espectro radiofónico, 2 mil 400 frecuencias, algunas de ellas muy grandes, como la de 600 megahertz que permitiría a un proveedor de telefonía celular proveer o crecer los servicios de 5G. Al respecto, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, al abordar el tema en la mañanera del pueblo, dijo que se trata de un albazo que quisieron dar. “No se puede permitir eso… Vamos a hacer todo lo jurídico que sea necesario para que no proceda, porque no es correcto”, aseguró. La 5G es la de mayor valor económico y estratégico de las telecomunicaciones. La mandataria federal destacó que la decisión es del Estado mexicano, no de unas cuantas personas molestas que son parte hoy del IFT. A su vez, Peña Merino dijo que esperan que en los próximos días, los comisionados del IFT frenen la licitación. No obstante, explicó que cuentan con una estrategia en la que participa la consejera jurídica de la Presidencia, Ernestina Godoy, para que, en la siguiente semana y media, esto quede frenado, y en su caso se vuelva a iniciar el proceso, una vez que esté configurado el nuevo regulador de competencia, como está establecido en la reforma del 28 constitucional. Refirió que un día antes de que el Diario Oficial de la Federación (DOF) publicó el decreto para la desaparición de siete organismos autónomos, entre ellos el IFT, este instituto hizo pública la licitación de 2 mil 400 cachitos y cachotes de espectro. Algunos, manifestó, son cachitos, porque son espectros locales, por ejemplo para radios comunitarias, y algunos son muy grandes, como el de 600 megahertz, que permitiría a un proveedor de telefonía celular proveer o crecer los servicios 5G, que es parecida a la de 700 que usa Altán, una empresa mexicana de telecomunicaciones. Entonces, sostuvo, “nosotros creemos que el proceso de licitación, de ocurrir con la configuración que tendrá el regulador de telecomunicaciones, no es apegado a lo que llaman en inglés due diligence o diligencia apropiada, porque es una institución que se está reconfigurando”. Explicó que se tiene que dar certeza jurídica tanto al Estado mexicano como a quienes adquieran concesiones de espectro. Dijo que la licitación, como está planteada, no cumple a cabalidad con algunos objetivos de cobertura social, aunque es parte del mandato que tiene el propio IFT, además de que en la ley y en la Constitución está el tema de cobertura en general, pero sobre todo social para estratos de menores ingresos o áreas remotas en donde no hay infraestructura. El funcionario también señaló que el tema del cobro de espectro es parte del aprovechamiento que tiene que tener el gobierno mexicano. Por tanto, sostuvo, la posición del gobierno es que esta licitación se frene. Al preguntar qué harán en caso de que los comisionados del IFT se nieguen a hacerlo, la presidenta atajó: “no se van a entregar… Lo que dice el decreto publicado en el DOF es que tienen que extinguirse, y tiene que haber un decreto de extinción de estos organismos que ya sale en estos días”. La mandataria afirmó que no es necesario interponer denuncias, porque sencillamente, a la hora de extinguir el organismo, ya no tiene atribuciones para licitar, y el nuevo va a cancelar cualquier licitación que pretendían hacer.
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