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XALAPA.- Aunque se comprometió a regresar la tranquilidad al estado, en medio de la cruenta lucha entre facciones de grupos de la delincuencia organizada, que ha dejado de decenas de jóvenes sin vida, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, rindió su Tercer Informe de Gobierno ante el Congreso estatal, liderado por Morena. Rocha Moya presentó de manera discrecional las cifras rojas de casi tres meses de violencia desatada por las facciones que se enfrentan del cartel de aquella entidad, escenario que cobra la vida principalmente de jóvenes, imberbes algunos, que lideran células de narcotraficantes o que se emplean en las filas del sicariato. El mandatario estatal, visiblemente nervioso, trastabillante, durante los casi 40 minutos que duró su discurso, admitió, de cara a la diputada local y viuda de Nemesio Cuén, exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, con quien tenía severas diferencias, y del hijo de éste, que hay una violencia temporal, pero evadió hablar de los antecedentes del 9 de septiembre, el día que se rompió la tranquilidad del estado ante los cruentos enfrentamientos entre ‘Los Chapitos’ y ‘La Mayiza’, jóvenes líderes descendientes de los fundadores del cártel. Ante representantes populares —legisladores locales, federales y senadores—Rocha Moya enumeró beneficios en salud para los sinaloenses, atención a la salud con techos y pisos reparados, de la llegada del turismo en cruceros a Mazatlán, de los 32 mil beneficiarios de la pesca. De los apoyos a grupos vulnerables, de atención a niños, al combate a la violencia contra las mujeres, y aprovechó para agradecer al Congreso federal por las leyes aprobadas en favor de este sector, pero no figuraron los números de las víctimas de violaciones sexuales que se denuncian a través de las redes sociales. Además, afuera del Congreso local, un grupo de sinaloenses manifestaron la realidad de la violencia. Poco después, el estruendo de las balas que han provocado el desplazamiento forzado interno de lo que el gobernador no dio cifras. Entre los asistentes estuvieron Ricardo Monreal, líder de la bancada federal morenista e Ignacio Mier Velazco. Al lado de ellos, otros políticos de representación popular. De parte del Ejecutivo federal no se mencionó al invitado representante. Rubén Rocha ventiló su estado personal. Dijo que no vive con su familia. “Vivo solo en mi casa”, aseguró, aunque se sabe que vive en la casa de gobierno, rodeado de vigilancia de las fuerzas armadas, Mientras los sinaloenses despiertan a altas horas de la noche ante el fragor de las balaceras.
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