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Xalapa, Ver.-
En México la desigualdad es un problema que afecta de manera estructural el acceso a todos los derechos de las personas, incluyendo la educación; la población indígena es uno de los grupos más rezagados en este ámbito. Nuestro país es uno de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que presenta las brechas educativas por razón étnica más amplias: la escolarización básica es apenas la mitad entre quienes se identifican como indígenas que entre la población no indígena. Mientras el 40 por ciento de los adultos de 25 a 64 años que no pertenece a grupos indígenas cuenta con educación básica; solo el 23 por ciento de quienes sí pertenecen a grupos indígenas tiene este nivel de estudios, de acuerdo con cifras de la OCDE. Este resultado se explica principalmente por la falta de infraestructura educativa (escuelas con servicios e instalaciones básicas) y personal docente en las comunidades indígenas. Otra de las barreras que enfrentan los estudiantes indígenas es la casi inexistente oferta de materiales y programas escolares adaptados a sus lenguas maternas, lo que limita, total o parcialmente, el aprendizaje de estas poblaciones.
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