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Foto:
Cortesia.
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Xalapa, Ver.-
Un joven perdió la vida en su intento por llegar al Hospital del IMSS 71, en Veracruz, era la segunda ocasión que acudía al área de urgencias pues en la primera le negaron el servicio. Sin embargo, esta ocasión el joven yo no aguantó a llegar y murió en la avenida Díaz Mirón. Sus acompañantes recriminaron la omisión del personal del nosocomio…LA TARDE de este sábado se registró una persecución de elementos de la Policía Estatal y el Ejército Mexicano a un motociclista en la Unidad Habitacional El Coyol, en Veracruz. Trascendió que fueron los propios uniformados de la SSP quienes habrían disparado en múltiples ocasiones contra el ocupante de una moto al llegar a la avenida JB Lobos, a unos metros de llegar a la transitada intersección de Eje 1 Poniente. De acuerdo a los primeros reportes, los uniformados de la patrulla marcada con el número económico 4071 fueron los que en su afán por detener al motociclista que se negó a parar, accionaron sus armas. Elementos de la Marina llegaron al lugar de la balacera en El Coyol. Posteriormente el convoy de ambas corporaciones se retiró del lugar. Más tarde, la propia SSP emitió un comunicado en el que informó que las detonaciones se realizaron únicamente de manera disuasiva para ahuyentar a un presunto delincuente que realizaba labores de 'halconeo'. La zona quedó debidamente resguardada por elementos de la Secretaría de Marina Armada de México quienes a su vez pidieron la presencia del personal de la Fiscalía para realizar el embalaje de al menos ocho casquillos percutidos…DOS JÓVENES, uno de ellos menor de edad, fueron por elementos de la Policía Estatal que buscaban a sus compañeros privados de la libertad en Antón Lizardo. Familiares de los agraviados denunciaron que los muchachos de 19 y 15 años, que son primos, habían salido a la tienda Lores a unas cuadras de Benito Juárez y Morelos donde se dio el violento plagio de los oficiales. Narran que los muchachos pasaban junto a las motos de los estatales que quedaron tiradas a medio camino completamente desconcertados pues no sabían qué había ocurrido y no vieron a los uniformados por ningún lado. Señalaron que en ese momento no había ningún acordonamiento y justo cuando ellos caminaban por ahí pasaba otra unidad de la misma corporación, cuyos elementos se abalanzaron sobre los dos jóvenes. El mayor de ellos relata que los agentes los golpearon sin mediar palabra alguna y los acusaron de ser ´halcones´ de la delincuencia organizada, para lo cual les quitaron sus teléfonos celulares y comenzaron a revisarlos sin su autorización, pues querían que “soltaran la sopa”, pero ellos respondían que solo iban a hacer un mandado. Al pasar un rato y no regresar, no comunicarse por teléfono la familia decidió salir a buscarlos, y los encontraron en manos de los policías que les realizaron el señalamiento sin ninguna clase de sustento. Luego de varios minutos de tensión y al ver que los jóvenes nada tenían que ver en el crimen, no tuvieron más remedio que dejarlos en libertad no sin antes advertir a sus mamás que deberían estar agradecidas de que no se los llevaron, a los jóvenes que no tenían nada que ver en la desaparición de los policías, ni disculpas les pidieron por agredirlos física y verbalmente.
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