| La liberación de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, en Culiacán, Sinaloa, muestra que México es un estado fallido y que su gobierno se sometió a la delincuencia, dijo el dirigente del PAN, Marko Cortés. |
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Foto:
La Jornada
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.- La liberación de Ovidio Guzmán, hijo del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, en Culiacán, Sinaloa, muestra que México es un estado fallido y que su gobierno se sometió a la delincuencia, dijo el dirigente del PAN, Marko Cortés.
Calificó como inaceptable que se haya liberado a Ovidio Guzmán, cuando se había logrado su detención, porque condena a la población a la inseguridad. Es absolutamente reprochable y tristemente marca al gobierno morenista como un gobierno cobarde para dar seguridad a la población.
Luego de entregar en la Corte la acción de inconstitucionalidad contra la Ley de Bonilla, Cortés Mendoza resaltó que si no renuncian los responsables de lo ocurrido, “entendemos que el presidente pacto con la delincuencia”.
Exigió la aplicación irrestricta de la ley y no el sometimiento del gobierno a la delincuencia organizada.
Por su lado, el dirigente de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, exigió una explicación exhaustiva de los acontecimientos.
No compartimos la retórica de las disculpas iniciales, los pretextos iniciales para no entrar al fondo del problema. Está en entredicho la capacidad que tiene el Estado mexicano para protegernos a todos, agregó.
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