Durante toda su existencia, los seres humanos han pugnado por abolir la diferencia de clases, eliminar la enorme diferencia que existe entre los capitalistas triunfadores y la clase trabajadora, aboliendo además la esclavitud y la vida miserable de los “sin trabajo” o sin medio de sobrevivir, los idealistas de la talla de Lenin, Engels, Marx y otros de semejante postura, crearon o intentaron implantar en el mundo entero el COMUNISMO, un sistema que en teoría eliminaba al gran capital y hacia a los trabajadores dueños de los medios de producción. Ilusión imposible de cumplir.
Desde que el ser humano fue creado y logro articular palabras para comunicarse, aparecieron por necesidad los lideres, sujetos que en forma elemental, arbitraria y despótica imponían su autoridad sobre los demás seres humanos, en alguna forma esos líderes necesitaron codificar sus anhelos de poder, mandato sobre los demás, crearon sus propias normas que al repetirse se convirtieron en leyes, se redactaron en monolitos en tablillas de piedra y con el invento de los pergaminos vegetales o minerales, quedaron impuestas esas normas para que la colectividad se sometiera a ellas y se diera la relación social igualitaria. Bella intención, pero idealismo imposible de cumplir.
La razón por la cual las leyes creadas e impuestas por los caciques eran imposibles de cumplir se dio por causa de una necesidad, crear el sistema de gobierno, el principio los lideres elementales se impusieron como gobernantes, después de algunas matanzas, pre revoluciones, la población subordinada logró elementales normas electorales, buscando entre los mejores, los más inteligentes que demostraban su sapiencia con los quehaceres vitales, como cazar animales para alimento, cultivo o recolección programada de plantas y lo más importante del quehacer de los gobernantes, imponer un elemental orden para evitar la gran diferencia de clases, se pretendió la igualdad.
La buena intención de igualdad sufrió los enfrentamientos entre quienes deseaban tener el poder, se mataron entre ellos y el elemental sistema burocrático se convirtió por necesidad, en dictadura, surgieron los reyes con normas absolutistas para dirigir, malo pero funcionó, había reyes buenos y la población veía en estos reyes carácter divino, creados por un Dios irreconocible pero dador y proveedor del sistema que les permitió convertirse en naciones con leyes y sistema de gobierno justo, casi igualitario.
A través de milenios, el ser humano ha sucumbido a la ambición de poder político, imponer su autoridad sobre los demás, aún más importante, el poder económico, con esos dos vectores el líder podía gobernar, hoy se impone lo mismo que en esos tiempos, solo que ahora la cosa política se ha deformado, impera el poder económico, lo que se nos viene por causa de la postcrisis COVID19 será de muy difícil solución, solo si la humanidad tomara el idealismo utópico, pensado por Marx algo podría rescatarse, pero si tenemos una persona con capital superior a 170,000 millones de Dólares, nada podrá hacerse; un cooperativismo, aceptado por los poderosos económicamente les salvará la vida, de lo contrario, tenemos en el panorama sociopolítico una codician revolucionaria que causará más muertos que los que podría causar el SARS-CoV-2. ¡AGUAS!
Agosto 31 del 2020 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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