La representante popular local no es otra cosa que un títere más del choleño.
Sus caprichitos políticos él se ha encargado de cumplírselos. Nadie mas
Todavía se le recuerdan esos aires de grandeza con que se paseaba por todo Veracruz cuando su titiritero fue mini gobernador.
Por donde pasaba no cabía la mujer, su pasado escabroso, ese que le quita el sueño y que aun la atosiga, con la sentada en el trono del vecino de El Estero, quedo atrás, allí fue donde Gamboa Torales se inflo. Hasta el modito de caminar cambió.
Si, así como lo leyó, a partir de allí todo fue excesos, bonanza, atrás quedaron los tiempos de escases, de penurias, de andar comiendo retazos de jamón embadurnados en bolillos duros, pero eso si ablandados y aderezados con chiles en vinagre.
Su paso por la legislatura local ha sido grisáceo, opaco, todo crítica, pero nada bueno aporta.
Lo curioso es que hacia el interior del grupo legislativo de Acción Nacional la presumen como lo mejorcito que tienen, imagínese nada más.
En días pasados dio una muestra más de sus locuras.
Le cuento.
Resulta que la dizque representante popular, pidió abordar tribuna para hablar hacer sobre el tema de Covid-19.
En esos arranques esquizofrénicos que de manera constante padece solicitó que la Casa Veracruz fuera habilitada como Centro Hospitalario para pacientes con coronavuris.
Si, así sin pensarlo y, como siempre, actuando al calor de la emoción, pidió tal sandez
Fiel a su estilo y a su costumbre dio paso a su perorata olvidando que dicho inmueble ya era la sede de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, albergando las oficinas de rectoría.
Hasta sus compañeros de bancada se rieron de ella, las caras de asombro de los integrantes de su pandilla fue mayúscula.
Sobra decir de los escándalos que ha protagonizado hacia el interior del congreso local, eso sin mencionar su estancia en la cárcel.
Lástima, la señora legisladora está perdiendo una gran oportunidad, la de servir honestamente y para bien a los veracruzanos, una oportunidad que difícilmente la podrá volver a tener.
Provecho.
ESTO APENAS COMIENZA.
La sociedad, pero principalmente las clases más vulnerables, las que menos tienen, se han desesperado.
Cada día son más constantes las demandas de apoyo en la vía pública, ya se está haciendo cotidiana la salida de familias enteras solicitando al gobierno su ayuda.
Los requerimientos se piden en especie o en efectivo.
Aun cuando las autoridades han hecho algo al respecto, no alcanza, ha sido insuficiente.
Todas estas personas el miedo a contagiarse lo han perdido, lo han olvidado ellos quieren comer, no le temen morir del virus, le temen morir de hambre.
Demandan empleo temporal al igual que la condonación de los servicios públicos mientras pasa pandemia, mientras pueden volver a trabajar de lo que sea, en lo que encuentren. También muestran sentido de responsabilidad.
Decenas de familias ya no soportan el encierro, ya no tiene que comer, ya no hay dinero.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), esta pandemia representa la "mayor amenaza a la economía global desde la crisis financiera de 2008".
Todos los sectores han sido golpeados, miles de gentes están muy preocupadas por lo que ocurrirá en los meses por venir.
Muchos tendrán que reinventarse y hacer un cambio brusco de giro, pero algo tiene que hacer para sobrevivir.
La clase empresarial está con los nervios de punta, no tan solo la familia en línea se encuentra directa en riesgo, también cargan con la preocupación de las familias que de su negocio dependen, de los cientos de trabajadores que tienen.
Lo cierto es que desde el comienzo de la crisis sanitaria por el covid-19, los expertos en finanzas han alertado que la pandemia afectaría a ambos lados de la economía, tanto la cadena de suministro como la demanda.
Como dicen en mi colonia, ya pasamos lo más difícil, ahora viene lo más cabrón.
MUSEO DE ANTROPOLOGIA.
Como ya es sabido el Museo de Antropología de Xalapa se encuentra cerrado temporalmente debido a la contingencia sanitaria.
Por lo anterior la Universidad Veracruzana habilitó la página de internet uv.mx/max, en donde aparece la liga que lo enlazará llanamente con el museo, en el que se podrá ver una serie de fotografías y audios que invitan a conocer cada sala y las piezas más importantes que resguarda.
En su recorrido virtual usted podrá admirar vestigios olmecas, la colección huasteca, así como vestigios de las culturas que se establecieron en la zona centro. Y todas las grandezas arqueológicas que tiene nuestro museo.
Recordemos que el MAX es el segundo recinto museográfico más importante de México después del Museo Nacional de Antropología ubicado en la Cuidad de Mexico.
En su colección podemos admirar 30 siglos de historia a través de mil 150 piezas que están exhibidas permanentemente.
No se pierda esta gran oportunidad, muy bien vale la pena.
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