Ya vamos a la mitad del camino y el problema sigue sin resolver.
El valemadrismo del titular de Salud, un tal Roberto Ramos Alor, es admirable, su dejadez ha golpeado enormemente en la salud de los veracruzanos.
Le cuento.
Ya en repetidas ocasiones familiares de pacientes con distintos padecimientos que son tratados en hospitales del sector salud de la entidad, han tenido que salir a las calles a denunciar la escases, tan severa, de medicamentos, de material de curación y de otros insumos propios del sector.
Los responsables de procurar la salud de millones de veracruzanos andan entretenidos en otras cosas, en otros asuntos sin importancia, situación que, en mucho, lacera a estos enfermos.
Por citarle un ejemplo le diremos que los pacientes oncológicos han dejado de recibir su tratamiento de manera oportuna y, según denuncias de los familiares, se debe al recorte del presupuesto para atender esta enfermedad.
La falta de medicinas y la apatía del titular de Salud en la entidad, ha perjudicado en mucho a estos pacientes, los cuales han visto retrasados sus procedimientos, situación que lesiona enormemente su estado físico.
Otros de los enfermos que han tenido que sufrir las consecuencias del desabasto y el recorte presupuestal son los de salud mental.
Los enterados precisan que cerca de un 40 por ciento de las fórmulas utilizadas para tratar estos males no existen en las dependencias del sector salud veracruzano. La insuficiencia es tal que los familiares han tenido que adquirirlas por sus propios medios, la respuesta que obtienen del personal de salud es la misma “no hay”, “no tenemos” o “no ha llegado”. Los motivos son múltiples y el perjuicio en el estado físico del paciente es considerable.
De igual forma ya son incontables las veces que familias de pacientes internados en la Torre Pediátrica del puerto de Veracruz, han salido a las calles denunciando el déficit de medicinas.
Madres de familia, tías, hermanas y hasta suegras, al no tener otra opción, han tomado medidas más drásticas ante tanta apatía, tanto abandono del sector oficial. Todas ellas, a una sola voz demandan de manera urgente la adquisición de los fármacos.
También, activistas de diversos colectivos han hecho pública la carestía de medicamentos antirretrovirales en instituciones veracruzanas, para el tratamiento del VIH.
A su decir los pacientes con VIH se encuentran en grave riesgo debido a la carencia de medicinas.
Lo cierto es que los pacientes bajo tratamiento antirretroviral enfrentan la incertidumbre de que su atención se interrumpa por los problemas de escasez que existen en los nosocomios veracruzanos.
Recordemos que la crisis por el desabastecimiento de medicamentos en el sector salud se agudizó escasos cuatro meses después de que el tabasqueño asume la primera magistratura federal, es decir en 2019 y todo es gracias a los severos recortes presupuestarios y a los cambios en la compra de las medicinas impuestos por el Gobierno del dueño de “La Chingada”.
Sin lugar a dudas que, aquí en la aldea, uno de los problemas más urgentes a solucionar que tiene el hijo de Atanasio sigue siendo la escasez de medicinas, pero a como están las cosas tal parece que eso le vale madre.
Provecho.
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